A más de un año de que se anunciara la imposición de un síndico federal, el Departamento de Educación aún no ha contratado a la entidad que supervisará el uso de fondos federales de la agencia.
De acuerdo con Eligio Hernández, secretario del Departamento de Educación (DE), la agencia continúa en negociaciones con la entidad seleccionada, Álvarez & Marsal, el cual esperan culminar en las próximas semanas.
El pasado 3 de septiembre, el funcionario indicó—en entrevista con este medio— que la agencia estaría completando la contratación en una semana. La contratación de Álvarez & Marsal podría ascender los $40 millones.
“Ambos bufetes [Álvarez & Marsal y Goldman Antonetti, el cual representa al DE] están en negociación de todas las cláusulas de este contrato. Es importante destacar que es un contrato que supera los $40 millones”, dijo Hernández al justificar que aún no se haya culminado la contratación de la entidad.
Agregó que espera que la agencia culmine el proceso de contratación antes de las elecciones del 3 de noviembre.
La empresa Álvarez & Marsal, según Hernández, también funge como síndico federal en las jurisdicciones estadounidenses de Guam e Islas Vírgenes.
Añadió que la firma —aunque no pudo precisar una cifra— podría estar supervisando fondos federales que fluctúan entre los $600 millones anuales.
Detalla asistencia estudiantil y docente a escuelas
Por su parte, Hernández comentó que la asistencia escolar —de estudiantes y el personal docente— ha registrado números similares a un año típico en el sistema de instrucción pública pese a que este semestre comenzó completamente a distancia.
Señaló que, de acuerdo a un informe realizado por la agencia el pasado 28 de septiembre, un 91% de los directores escolares estaban asistiendo a sus labores diarias. Mientras que un 91% del personal no docente se mantuvo asistiendo a sus labores cotidianas dentro del DE.
Mencionó que en el informe participaron 775 escuelas y otras 66 no completaron el informe.
Mientras que se registró una asistencia del 97% de los maestros y maestras y un 88% de los estudiantes reportaron asistencia en las escuelas participantes.
Hernández catalogó estas cifras como el “comportamiento normal” en la asistencia al sistema de instrucción pública.
