A ocho meses del comienzo de la pandemia y ante un alza en incidentes de violencia de género, Vilmarie Rivera, presidenta de la Red de Albergues, denunció que el gobierno aún carece de un plan para atender a estas víctimas y sobrevivientes en medio de la emergencia.
“Siguen las organizaciones haciendo, con poco, mucho. Pero la respuesta tiene que venir también del ala gubernamental quien tiene que asumir esa responsabilidad”, señaló Rivera en entrevista con Metro.
Rivera, quien también dirige el Hogar Nueva Mujer, indicó que en octubre recibieron alrededor de 289 llamadas de víctimas y familiares de estas solicitando ayuda. Indicó que para esa misma fecha el año pasado registraron unas 93 llamadas. Rivera también comentó que es habitual que luego de desastres naturales o emergencias, se exacerben los problemas sociales. Ante este escenario, conmemorarán este año el Día de No Más Violencia Contra la Mujer el próximo 25 de noviembre.
“Ya la mujer estaba viviendo como víctima en una relación de violencia y ahora se complica más obligándole a, no solo a estar bregando con la pandemia, sino también con su situación previa de violencia. Así que la hemos empujado a una doble pandemia, lamentablemente, a que la enfrente y que no tenga muchos recursos disponibles para salir y buscar ayuda”, dijo.
Mencionó que las propias organizaciones se han costeado la compra de materiales para atender la crisis del COVID-19 en sus albergues. “El gobierno de Puerto Rico no ha destinado ni un solo dólar a los albergues, ni una mascarilla nos han entregado”, dijo. “El gobierno no tiene ni un solo albergue especializado para temas de violencia y si nosotras como organización dejáramos de dar ese servicio —y has visto la situación tan difícil que estamos viviendo como país ante el alza de casos de violencia de género— imagínate si nosotras estuviésemos cerradas ahora mismo. Sería nefasto”, cuestionó.
Agregó que en abril presentaron una propuesta al Departamento de Salud (DS) para desarrollar un albergue exclusivamente para víctimas de violencia de género que arrojen positivo al coronavirus. Sin embargo, mencionó que, hasta hoy, no han recibido respuesta. Ayer, el secretario del DS, Lorenzo González, dijo en vistas de transición que cuentan con el hotel municipal de Comerío para hospedar víctimas de violencia de género positivas a COVID-19 que sean asintomáticas.
Por su parte, Lersy Boria, procuradora de las Mujeres, insistió en que, como ente fiscalizador, buscan que todas las agencias funcionen de manera coordinada. “Mi postura siempre ha sido, como agencia fiscalizadora, que todas las agencias tienen que trabajar de manera holística. Es parte de nuestro reclamo que le presentamos a la gobernadora Wanda Vázquez, que se trabaje el aspecto de seguridad, justicia, tribunales y que al mismo tiempo se coordine con Educación y Familia”, añadió.
En cuanto a los reclamos de Rivera, Boria comentó que continúa ofreciendo asesoría técnica a los albergues que subvencionan y que monitorean periódicamente la capacidad para recibir víctimas.
Mientras que Marilú Cintrón, directora de la Oficina de la Primera Dama, indicó que desde La Fortaleza se coordinó un grupo de trabajo —junto a la Oficina de la Procuradora de la Mujer (OPM) y la Policía— para atender la alta incidencia de violencia doméstica en medio de la pandemia.
“Entre los asuntos medulares atendidos fue el de la seguridad de las mujeres víctimas de violencia doméstica y el refuerzo a las rondas preventivas a aquellas mujeres con órdenes de protección, el refuerzo de la línea de emergencia de la OPM y los aspectos de atención a la salud física de las víctimas ubicadas en albergues de protección”, señaló la funcionaria, quien a su vez aseguró que el gobierno de Puerto Rico sí conformó un task force social pese a la poca visibilidad pública de ese grupo en comparación con el grupo económico y médico.