Con alrededor de 38,000 enfermeros y enfermeras, este sector es el más grande dentro de los distintos grupos de profesionales de la salud que, de acuerdo con las guías federales y el plan preliminar del Departamento de Salud, recibirán prioridad en la administración de la vacuna contra el Covid-19, proceso que se anticipa arranque la semana próxima.
La presidenta del Colegio de Profesionales de la Enfermería (Cpepr), Ana Cristina García, precisó que, de ese universo, unos 30,000 laboran en alguno de los 65 hospitales públicos y privados en la isla. La subsecretaria de Salud, Iris Cardona, dijo ayer a Metro que el personal de salud en los hospitales asciende a cerca de 40,000 individuos, por lo que los profesionales de enfermería compondrían la mayor parte del primer grupo en beneficiarse de la inmunización contra el peligroso virus.
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No obstante, García se abstuvo de ofrecer un estimado de la fecha en que la totalidad o gran parte de los enfermeros y enfermeras habrá recibido la vacuna, toda vez que ese elemento dependerá de la cantidad de dosis que el gobierno federal autorice enviar al país si, en efecto, la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) aprueba en los próximos días las vacunas producidas de manera conjunta por Pfizer y BioNTech, en primera instancia, y la de la compañía Moderna, posteriormente.
Cardona precisó que el pasado viernes Salud supo que Puerto Rico recibirá 205,000 dosis de la vacuna de Pfizer en diciembre, así como 147,000 de Moderna, para un total de 352,000 dosis. Si la FDA autoriza el uso de emergencia de la vacuna de Pfizer este próximo jueves, la semana próxima la isla podría recibir 30,000 dosis de este producto, en lugar de las 90,000 que se habían asignado previamente.
Aunque García señaló que en el Cpepr no han tenido acceso al plan de distribución de la vacuna sometido al Centro para el Control y Prevención de Enfermedades – del cual Salud solo ha hecho disponible el resumen ejecutivo– sí reconoció que la entidad ha participado de la preparación logística para la proyectada llegada de la inmunización.
“Hemos formado parte de la discusión. Ya el Cpepr está preparando los voluntarios que tenemos, que son los que hacen las clínicas de la prueba serológica de Covid-19, esos mismos enfermeros se van a mover a la isla. Ya están cogiendo los entrenamientos de Covid para hacer nuestras propias clínicas de vacunación”, dijo García, al precisar que sería parecido a los espacios en que se administra anualmente la vacuna de la influenza.
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De acuerdo con García “todos” los enfermeros han estado adiestrándose para la administración de la vacuna del Covid-19, que el menos en el caso de los productos de Pfizer y Moderna requiere dos dosis aplicadas con entre tres y cuatro semanas de diferencia, respectivamente.
“De esa manera ellas van a poder vacunar a sus colegas enfermeros y a todos los demás profesionales. Con Salud hemos llenado unos formularios para orientación a la comunidad sobre la vacuna, para la administración de la vacuna. Vamos a hacer clínicas en los lugares no estructurados, los lugares que no son hospitales. En eso nos estamos preparando. En los hospitales en sí eso lo planifican los administradores”, subrayó la líder del Cpepr.
Luego de que en la fase 1A se logre vacunar al personal médico y a residentes y empleados de centros de cuido prolongado, en la fase 1B Salud proyectó la inmunización de personal de primera respuesta, como serían los policías y bomberos. En la fase 1C, en tanto, se vacunaría a personas consideradas de alto riesgo por su edad o condiciones de salud preexistentes.
La fase 2 tendría lugar una vez aumente la disponibilidad de las vacunas y esta pudiera estar disponible en centros de vacunación tradicionales y farmacias de la comunidad.
Cardona ha insistido que las transiciones entre fases serán un proceso dinámico que se desarrollará en función de la disponibilidad de las vacunas.
