El hijo del presidente electo Joe Biden, Hunter, dijo el miércoles que enfrenta una investigación federal sobre sus impuestos, situación que vuelve a poner de relieve las interrogantes sobre sus asuntos financieros que persiguieron la campaña de su padre.
Investigadores federales entregaron el martes una tanda de citaciones, incluido Hunter Biden, según una persona al tanto de la investigación y que solicitó el anonimato a fin de hacer declaraciones sobre una pesquisa en marcha. La investigación fiscal se centra en sus negocios, señaló la fuente.
La investigación del Departamento de Justicia, que se enfoca en posibles delitos de fraude fiscal, ha estado en curso desde al menos un año antes de que el presidente electo, Biden, anunciara su candidatura, según otra persona con conocimiento del tema. Los investigadores no se comunicaron con nadie en las semanas previas debido a una política del Departamento de Justicia en torno a las elecciones que prohíbe actos explícitos de investigación.
En un comunicado difundido por la oficina de transición del presidente electo, Hunter Biden dijo que se enteró de la pesquisa el martes pero no dio detalles sobre lo que se investiga.
“Tomo este asunto con mucha seriedad, pero confío en que una revisión profesional y objetiva de estos asuntos demostrará que manejé mis asuntos de manera legal y apropiada, incluso con ayuda de asesores fiscales profesionales”, agregó en un comunicado.
Hunter Biden ha sido blanco de Donald Trump y sus aliados desde hace tiempo, quienes lo acusan de sacar provecho de sus conexiones políticas. Trump y sus simpatizantes también hicieron acusaciones infundadas de corrupción en relación al trabajo de Hunter Biden en Ucrania cuando su padre era vicepresidente y dirigía los asuntos del gobierno de Obama con esa nación del este de Europa.
La revelación sobre la pesquisa federal, encabezada por la fiscalía federal en Delaware, tiene lugar en un momento complicado para el próximo presidente, que está conjuntando su gabinete. Su nominado a secretario de justicia podría tener que tomar la investigación sobre Hunter Biden si la pesquisa continúa al momento en que Biden padre asuma la presidencia el 20 de enero.
“El presidente electo Biden está sumamente orgulloso de su hijo, que ha pasado por desafíos complicados, incluyendo los intensos ataques personales de los últimos meses sólo para surgir más fuerte”, indicó el equipo de transición en un comunicado.
No es la primera vez que el hijo menor de Biden ha estado antes envuelto en controversias. Cuando su padre era vicepresidente, Hunter ingresó en la Reserva Naval y fue dado de baja después de que diera positivo a consumo de cocaína, revelando posteriormente una lucha de años contra las adicciones.
En 2014 se integró al consejo de administración de la compañía ucraniana de energía Burisma, suscitando preocupaciones sobre la percepción de un conflicto de interés debido a que Biden padre estaba sumamente involucrado en la política de Estados Unidos hacia Ucrania. Una investigación del Senado, bajo control republicano, no identificó ninguna política que hubiera resultado directamente afectada por la labor de Hunter Biden.
En las semanas previas a la elección, partidarios de Trump aprovecharon la existencia de una laptop que según ellos estaba relacionada con Hunter Biden y —el surgimiento de alguien que sostiene que tuvo discusiones de negocios con él— para plantear dudas sobre el conocimiento de Joe Biden de las actividades de su hijo en Ucrania y China. El presidente electo ha dicho que no discutió los negocios internacionales de su hijo con él y rechazó haber aceptado dinero de un país extranjero”.
El tema de la computadora portátil salió a la luz pública en octubre cuando The New York Post informó de correos electrónicos que, aseguró, provenían de la laptop de Hunter Biden y que habían sido entregados por Rudy Giuliani, el abogado personal de Trump.