Un buen empujón al portón oxidado, esquivar la maleza y los escombros hasta llegar a la parte posterior del edificio principal es suficiente para acceder a su interior, que está sin puertas. Desde el tercer piso, los salones ya sin ventanas de la Escuela Carmen Gómez Tejera en Aguadilla enmarcan la isla Desecheo, mientras que al mirar hacia el norte, se aprecia por el hueco un antiguo muelle de azúcar. En la escuela el tiempo y el salitre no han borrado la pintura de algunos pasillos donde todavía se puede leer “Tus valores cuentan” o “Mi confianza está puesta en ti”.
La aprobación para vender escuelas públicas para allegar recursos al Gobierno de Puerto Rico tuvo un aumento considerable de transacciones desde el verano de 2019. Sin embargo, sólo un 4% de los 960 planteles que distintas administraciones han cerrado durante la última década se han convertido en ingresos para el erario. Para algunos inversionistas, el proceso para obtener este tipo de propiedad, que maneja un comité presidido por el jefe de la Autoridad de Asesoría Financiera y Agencia Fiscal (AAFAF), tomó entre dos a seis meses, mientras que otros esperan hace más de un año para firmar la compraventa.
De las 40 propuestas aprobadas por el Comité de Evaluación y Disposición de Bienes Inmuebles (CEBDI) la mayoría han dicho que conservarán los planteles con un propósito educativo, como la Escuela Julio de Burgos de Carolina, convertida en la Fountain Christian Bilingual School. Aún así, casi la mitad de estas 40 propiedades están actualmente en el abandono o vandalizadas, dos escuelas ya no existen luego de que sus nuevos propietarios las demolieran, y sólo siete se encuentran en uso, arrojó una investigación del Centro de Periodismo Investigativo (CPI).
El CEBDI aprobó vender 24 escuelas en 2019, un aumento de 380% en comparación a las primeras compras aprobadas en 2018: las escuelas Genoveva Pérez de Rincón, Antonio Sánchez de Aguada, Luis T. Baliñas de Aguas Buenas, Martin G. Brumbaugh de San Juan, y Charles T. Irizarry de Mayagüez. Estas ventas eran desconocidas hasta abril de 2019, cuando un subcomité de La Fortaleza las confirmó.
El Comité dispuso que otras 92 escuelas fueran arrendadas, cedidas en usufructo o subastadas. Antes de la compraventa de la escuela de Mayagüez, se firmaron otras dos ventas por las escuelas de Aguadilla y la John F. Kennedy de Caguas, según reveló una lista publicada por la AAFAF, que junto a los jefes de la Oficina de Gerencia y Presupuesto y el Departamento de Desarrollo Económico y Comercio componen el CEBDI. El documento omite la aprobación de otra venta, la Escuela Ramón Brugueras de Caguas, que el CPI pudo corroborar examinando las resoluciones del Comité.
En lo que va de 2020, once compras han sido aprobadas por este Comité, aún cuando gran parte de las agencias permanecieron cerradas por espacio de tres a cuatro meses tras la declaración de emergencia por la pandemia del coronavirus.
Una visita del CPI a las escuelas vendidas y entrevistas a algunos de sus nuevos propietarios ofrece un panorama más claro de estas transacciones.
Primeras ventas
De las primeras cinco ventas, divulgadas en abril de 2019, solamente la Escuela John F. Kennedy continuará como espacio educativo luego que Caguas Learning Academy, Inc. la adquiriera por $470,000. El colegio bilingüe y especialista en la corriente de educación especial tiene una matrícula de poco más de 200 estudiantes.
La directora del colegio, Janice Fernández, describió el proceso para adquirir el plantel como “largo, cuesta arriba y tortuoso”. En principio quería comprar la Escuela Ramón Brugueras en Caguas porque era “mucho más pequeña y trabajamos con grupos pequeños, 12 niños o menos por salón. De la noche a la mañana se la dieron a una corporación y al día de hoy esa escuela está abandonada”.
Otras dos escuelas fueron adquiridas por The Morgan Reed Group. Las propuestas para comprar estos planteles fueron presentadas por su principal oficial en la región del Caribe, Brian Tenembaum, bajo compañías registradas con distintos nombres, como Mr. Blue Ocean LLC, Mr. Bull LLC y Shinrai Holdings LLC. Las tres comparten un mismo agente representante, Robert A. Danial.
La firma compró la Escuela Antonio Sánchez Ruiz de Aguada por $460,000 y los dos planteles contiguos de Aguadilla por $780,000 primero. Entienden que un hotel sería de beneficio para el municipio de Aguadilla tomando en cuenta su proximidad al aeropuerto y localización en el centro urbano, según refleja el Plan de Destino Aguadilla – Isabela realizado por Foundation for Puerto Rico. La última compra de Morgan Reed fue la Escuela Martin G. Brumbaugh en Puerta de Tierra, construida en 1913 y también con vista al océano Atlántico. El patio de la escuela acumula basura, pupitres y escritorios que alguna vez fueron de utilidad, y en la entrada principal se colocó una caja electrónica con código para acceder a la llave del portón.
El grupo Morgan Reed tiene sede en Florida, pero invierte en bienes raíces en estados como Illinois, Ohio y Connecticut. En Puerto Rico se estableció en el 2014, atraído por las exenciones que ofrecen las leyes 20 y 22, y desde entonces ha adquirido propiedades para uso comercial y residencial en el área metropolitana, especialmente en el Viejo San Juan, Santurce y Miramar. Durante el periodo electoral que recién termina, Tenembaum donó $8,400 entre candidatos tanto del Partido Popular Democrático como del Partido Nuevo Progresista.
En Rincón, la Escuela Genoveva Pérez cerró en 2018 y en diciembre de ese mismo año se aprobó su venta por $485,000 a la firma de construcción PR CR Investment Corp., propiedad de Carlos Rodríguez Camacho. A finales de 2019, esta firma local de inversión adquirió otra escuela en el área oeste, la Charles T. Irizarry de Mayagüez, por $720,000.
El plantel de Mayagüez fue demolido con la intención de levantar un centro comercial, pero la Oficina de Gerencia y Permisos (OGPe) aún no ha dado el visto bueno al diseño de construcción, explicó Rodríguez Camacho al CPI.
“La de Rincón es tan bonita. Hay tantos proyectos que me gustaría hacer”, dijo el empresario, y se refirió a la posibilidad de un guest house o una égida, pero con la pandemia y los temblores “todo el mundo se ha aguantado”. “Siempre mantengo la propiedad, la limpio, y la estoy dejando aguantada por si se necesita usar de emergencia para refugio”, añadió.
Por su parte, Hula Properties Inc. compró por $400,000 la Escuela Luis T. Baliñas de Aguas Buenas, cerrada en 2018 y recomendada para la venta por el Comité al final de ese mismo año. Dos meses después, el traspaso fue firmado por Awilda Quiñones Ramos, quien preside la Junta Directiva de la cadena de supermercados Econo y es la segunda generación de una familia dueña de cinco de estos comercios en Aguas Buenas, Juana Díaz, Aibonito y Ponce. Durante el verano de 2019 el plantel fue demolido.
Entre 2016 a 2018, Quiñones Ramos donó $2,400 entre el Partido Nuevo Progresista (PNP) y la alcaldesa de Canóvanas, Lornna Soto; y este año donó $1,000 al presidente cameral Carlos ‘Johnny’ Méndez. El CPI intentó contactarla a través de la administración de la cadena de supermercados para indagar sobre sus planes para el terreno que alguna vez albergó la escuela, pero las gestiones fueron infructuosas.
A ciegas sin inventario de bienes públicos
La Escuela Jesús Rivera Bultrón en Carolina, cerrada en 2017, opera desde abril de 2018 como colegio privado luego que la Administración Rosselló Nevares alquilara el plantel a razón de un dólar al mes a Jean Louis Christian Academy & Day Care. Cuatro meses más tarde, el CEBDI aprobó que se vendiera por $640,000 pero no se ha firmado el contrato de compraventa. La resolución que aprueba su venta no identifica al proponente.
La fundadora de la academia, Jessika Colón, dijo que “no la he comprado. Si la vendieron a otra persona tampoco sé. Mi contrato sigue siendo de alquiler hasta diciembre”, al tiempo que confirmó que junto a su esposo y cofundador del colegio, Luis Martínez Torres, continúa el proceso para comprar la escuela.
Colón, como el resto de la ciudadanía, desconoce el estatus de la propiedad que arrienda porque, contrario a lo que establece el Reglamento Único para la Evaluación y Disposición de Bienes Inmuebles del Gobierno, en el portal de la AAFAF no se ha publicado el inventario oficial o mapa de activos de todos los bienes. El Sistema de Búsqueda creado por la Junta Revisora de Propiedad Inmueble tampoco actualiza con regularidad el estatus de ocupación de las edificaciones y terrenos públicos. Cada entidad de la Rama Ejecutiva debe preparar su inventario y notificar tanto al Comité como a la Junta cada vez que haya un cambio (venta, alquiler o usufructo) con alguna propiedad.
La falta de información sobre la disposición de propiedades del Gobierno lleva a confusiones entre inversionistas y legisladores. Tal fue el caso de la Escuela Tomás Carrión Maduro de San Juan comprada por Cinemas Management of Puerto Rico, de la cadena Caribbean Cinemas.
La venta de ese plantel se firmó en agosto del 2020 pese a que la Legislatura prometió el plantel en alquiler a la educadora Joan Agosto, quien buscaba ampliar su organización sin fines de lucro Academia EduSapiens. Caribbean Cinemas adquirió la propiedad por $370,000 para expandir su oficina central, que colinda con el plantel. Aunque no se observan trabajos de construcción o rehabilitación a simple vista, el plantel luce limpio y su estacionamiento está en uso, corroboró el CPI. La administración de Cinemas Management no estuvo disponible para responder sobre los planes para la estructura de tres edificios y una cancha bajo techo.
De acuerdo al Reglamento, los planteles en desuso deben “dedicarse a actividades para el bien común ya sea para usos de organizaciones sin fines de lucro, comerciales, o que promuevan la activación del mercado inmueble y la economía en general”.
En Ponce, la organización de base de fe El Pesebre Inc., presidida por la pastora Ruth Pagán, ocupó la Escuela Román Baldorioty de Castro en enero para recibir a damnificados por los terremotos. Cuatro personas siguen refugiadas allí.
Pagán desea mantener la escuela como albergue pero, “no contamos con $435 mil que nos piden por la estructura. Nosotros trabajamos a base de donaciones. La prórroga para pagar esa cantidad venció y se hizo una apelación para que nos la cedieran como institución sin fines de lucro, pero no hemos recibido más información de AAFAF, ni de DTOP, ni nada”, y teme que con la escuela ubicada en el barrio Cantera ocurra algo similar a lo que pasó con la Escuela Tomás Carrión Maduro, que se la prometieron a un grupo y se la dieron a otro, con fines comerciales.
En 2018, la pastora presentó una propuesta para usar la escuela y obtuvo autorización de AAFAF para entrar al lugar a limpiarlo, “porque aquí hay como tres escuelas juntas y una de ellas ya la habían vandalizado. Nosotros teníamos el temor de que hicieran lo mismo con esta escuela”.
El precio de la compraventa propuesto por AAFAF es muy oneroso para esta organización sin fines de lucro, por lo que decidieron “provisionalmente que el contrato se cambiara a alquiler o usufructo, explicó Iván Ayala Cruz, abogado de Pagán. Aunque la agencia dio el visto bueno en abril, todavía no les ha enviado el nuevo contrato para revisión.
La directora de la Secretaría de Desarrollo Humano del municipio de Caguas, Aida I. González Santiago, se expresó preocupada porque “hay escuelas que ahora mismo desconocemos quiénes son los propietarios”. Explicó que desde un inicio hubo interés por parte de la ciudad en solicitar estas escuelas “para proyectos de desarrollo social”, pero al municipio nunca le otorgaron las propuestas, y las otorgaron a otras organizaciones.
Algunos de estos planteles, aunque ya estén en manos privadas, no necesariamente están recibiendo mantenimiento o están operando. González Santiago mencionó que mientras hay una escuela en el barrio Cañaboncito “que estaba llena de caballos y esta organización comunitaria decide abrirla y la están pintando, dando mantenimiento”, hay otra, la Luis Muñoz Marín, que “está perdida”.
Gobierno deja a algunos inversionistas en el limbo
Una compraventa se firmó en menos de un mes luego de que la compañía VLC Group, presidida por el ingeniero Carlos Collazo Maldonado, presentara una propuesta para la adquisición de la Escuela Rafael Quiñones Vidal de San Juan. Mientras, la Academia Presbiteriana de Carolina intenta desde 2017 comprar la Escuela Lola Rodríguez de Tió, cerrada desde el 2014.
Según la AAFAF, cerrar algunas compraventas demora por problemas de inscripción del inmueble en el Registro de la Propiedad, diferencias en la mensura o cabida, necesidad de segregar, o porque la parte compradora solicita prórroga. Hasta diciembre, un total de 17 proponentes esperan firmar la compra de escuelas.
A simple vista, el CPI pudo constatar el mantenimiento que se le ha dado a la escuela colindante con la urbanización Jardines de Montehiedra adquirida por VLC. En cambio, la Escuela de Valle Arriba Heights en Carolina está casi cubierta por la maleza, al menos dos áreas fueron incendiadas, y algunas partes de la propiedad son usadas para practicar gotcha.
Collazo Maldonado, quien tiene registradas otras dos empresas para instalar antenas de telecomunicaciones, no respondió a llamadas de este medio para detallar los planes para el plantel de San Juan. Por su parte, el director ejecutivo de la Academia Presbiteriana, Cruz A. Negrón, va perdiendo el ánimo sobre los planes de adquisición para ampliar sus servicios educativos.
“A lo mejor estamos luchando contra algo que no nos conviene o, si no se ha dado, es por algo. Eso nos ha llevado un poco a bajar el interés o las gestiones porque estamos desilusionados” con el proceso de compra, dijo Negrón. Las últimas comunicaciones con AAFAF y el Departamento de Transportación y Obras Públicas (DTOP) fueron en febrero y marzo, respectivamente.
La agencia informó que tenían 45 días para gestionar un ajuste a la tasación de la propiedad, afectada por los temblores a principios de año, mientras el director de la Oficina de Administración de Propiedades del DTOP, José A. Torres, alertó que le quedaban 30 días para cerrar la compraventa de la escuela por $700,000. Aunque Negrón dio seguimiento a esta correspondencia en mayo no ha vuelto a escuchar de ninguna entidad.
Otro que no ha recibido respuesta del DTOP sobre las escrituras para cerrar la compra de la Escuela Guillermo González es el presidente de Salinas Christian Academy, Joseph Ortiz Mercado, quien a principios de año propuso la adquisición del plantel para “expandir los servicios que ofrecemos en la academia y a la comunidad”. Dentro de poco se cumple un año desde que presentó su propuesta al CEBDI.
Ana Pérez, directora del colegio Emadrián (EBS Academy Inc.), informó que no ha tenido más noticias de AAFAF desde septiembre para adelantar la compra de la Escuela Braulio Dueño Colón de Bayamón. El colegio bilingüe especializado en bellas artes queda a menos de una cuadra de este plantel y allí desea expandir su matrícula e incluir servicios educativos para adultos.
La Escuela José Colombani Rosario cerca de la calle Paraná en San Juan, pudiera servir a la población de adultos mayores pero los presidentes del centro de cuido de adultos mayores Hogar Loma San Agustín Inc., Norberto Medina Zurinaga y Juanita Aponte Morales, esperan hace meses para firmar la compra del plantel.
Aponte Morales dice que ha llorado a lo largo del proceso. “Es tan deprimente, porque yo estoy lista para comprar mañana pero ellos [el Gobierno] no se organizan. Ha sido una pesadilla. Cada vez que pasamos [por el plantel] está más deteriorado; está hecho un hospitalillo. Se han llevado puertas, lámparas, rompieron los candados”. Medina Zurinaga, por su parte, dijo que la última comunicación que tuvo con la Autoridad de Edificios Públicos, agencia titular de la propiedad, fue hace ocho meses y quedaron en que necesitaban completar una mensura.
Otro ejemplo de una compra en el limbo es la Escuela Alfonso López García de Dorado. El plantel está abandonado y vandalizado a pesar de que el CEBDI aprobó en diciembre de 2019 la venta a la organización sin fines de lucro, Divine Children School.
Aunque la Escuela Ramón Brugueras de Caguas no aparece en la lista de AAFAF como vendida, una resolución del CEBDI señala que sería comprada por Professional Career Training Inc. por $430,000, empresa que la alquila desde el 2018 por un dólar al mes. La empresa dirigida por Gumersindo López Rodríguez, donante del Partido Nuevo Progresista (PNP) y del exgobernador Ricardo Rosselló Nevares, acumula $9,328,854 en contratos con el Gobierno desde al menos 2008 para brindar servicios estudiantiles y adiestramientos.
“He sometido varias comunicaciones para que renueven el contrato de arrendamiento. Tengo la opción a compra, y hace como una semana atrás tuve comunicación de que estaban evaluando esa propuesta”, informó López Rodríguez al CPI.
Programa Head Start motiva compras entre municipios y organizaciones sin fines de lucro
Siete municipios obtuvieron fondos a través del programa federal Head Start y Early Head Start para adquirir 10 escuelas y ampliar estos servicios. Los primeros en adquirir planteles cerrados fueron Utuado y Canóvanas, seguidos por Humacao y Caguas. Isabela, Dorado y Barceloneta siguen en el proceso para cerrar las compras.
En Utuado el municipio adquirió la Escuela Félix Seijo, cerrada en 2017, por $132,000. El exalcalde Ernesto Irizarry Silva planificaba demoler el plantel porque, “llegaron los temblores y la escuela salió columna corta”.
El plan de la alcaldesa de Canóvanas, Lornna Soto, para la Escuela Parcelas de Campo Rico es demolerla y construir “un centro de educación temprana”, pero espera la decisión del Tribunal de Apelaciones luego que un proponente impugnara la subasta para las obras en el plantel adquirido por $176,000. Mientras, la escuela sigue abandonada y vandalizada.
En Humacao, el exalcalde Luis Raúl Sánchez firmó la compra de la Escuela Adrián Medina por $336,000 para continuar ofreciendo servicios bajo el programa Head Start disponibles en el plantel desde 2018 bajo un contrato de arriendo con DTOP. Además, su administración estaba “en gestiones para adquirir la [Escuela] Víctor Rincón del barrio Junquito”, que también alquila para un centro Head Start desde 2018. Este último plantel fue clausurado en 2017 y su venta fue aprobada por el CEBDI en agosto de 2019 por $539,000.
Caguas pudiera abrir dos centros Head Start en 2021, estimó González Santiago, luego que el municipio adquiriera en octubre las escuelas Oscar L. Búnker y Juan Navarro por $450,000. El primer plantel está vandalizado mientras el segundo luce en buen estado.
El alcalde de Dorado, Carlos López Rivera, también quiere abrir un centro el próximo año pero espera hace seis meses por los fondos del programa Head Start para completar la compra de la Escuela Teresa Préstamo por $625,000. “Lo idóneo sería que para agosto del año que viene la escuela esté en disposición para ofrecer servicios”, dijo.
El municipio de Barceloneta se interesó por dos escuelas de Arecibo, la Domingo Ruiz y la Francisco Susoni, a razón de $626,000 por ambas. Su ejecutiva municipal, Wanda Soler Rosario, no atendió preguntas del CPI sobre su intención de comprar planteles en Arecibo. De la resolución que aprueba las compras se desprende que las escuelas eran usadas como centros Head Start desde el 2015. El primer plantel está identificado con un letrero del programa y se pueden apreciar obras de remodelación en uno de sus edificios. La segunda escuela no parece recibir mantenimiento con regularidad, aunque fue usada como colegio electoral en noviembre.
El municipio de Isabela propuso comprar por $970,000, la Escuela Luis Muñoz Rivera, propiedad de cinco edificios que colinda con un centro Head Start y está abandonada hace tiempo.
Organizaciones sin fines de lucro también compraron escuelas para expandir los servicios del programa Head Start. Por ejemplo, The New York Foundling, que atiende a preescolares en Puerto Rico desde 1975, adquirió las escuelas Rufino Huertas de Coamo y Rosendo Matienzo Cintrón en Cataño, por un total de $1,460,000. Ambas escuelas serán demolidas a partir de enero porque tienen asbesto, dijo la directora de la organización, Carmen Villafañe.
La adquisición de la Escuela Isaac González Martínez de San Juan por parte del Programa Head Start de la Iglesia Bautista de Quintana Inc. tomó 15 meses. El plantel cerrado desde el 2017 está vandalizado, su estacionamiento es ocupado como un taller de mecánica, y una llave rota constantemente desperdicia agua potable. La organización acumula contratos con el Gobierno desde el 2009 ascendentes a $1,278,740, principalmente con la Administración para el Cuidado y Desarrollo Integral de la Niñez (ACUDEN) como entidad delegada del programa Head Start.
A principios de 2020, se aprobó la venta de la Escuela El Parque de San Lorenzo a la Fundación para el Desarrollo del Hogar Propio, Inc. por $275,000. La organización sin fines de lucro tiene contratos con el Gobierno desde el 2009 por un total de $19,993,672, la mayoría con la ACUDEN como entidad delegada del programa Head Start.
El gerente fiscal de la Fundación, Aníbal Arroyo, explicó que, “el Gobierno federal dio la opción al programa Head Start después del huracán María para relocalizar los centros que sufrieron muchos daños o que estaban en áreas inundables con los fondos de recuperación. Uno de los lugares que le propusimos al Gobierno federal fue la Escuela del Parque, se aprobó la compra y asignó el dinero, pero todavía estamos en los trámites con el Gobierno local”.
Entidades educativas privadas
Aunque la Legislatura emitió una resolución en octubre de 2019 para ceder la Escuela Segundo Ruiz Belvis de San Juan a la organización sin fines de lucro Feria Internacional del Libro de Puerto Rico Inc., en diciembre de ese mismo año la Fundación Banco Popular la compró por $1,200,000, “para establecer un centro que ofrecerá educación vocacional para adultos y un programa de artes para jóvenes de comunidades cercanas, ambos libre de costo para los participantes”. El plantel ya tiene letreros de propiedad privada pero está vandalizada y parte de sus techos necesitan reparación urgente.
Según la declaración de la Fundación, se seleccionó este plantel “por su localización y cercanía a posibles colaboradores y escuelas que pueden enviar a sus estudiantes a beneficiarse de los servicios y programas que se ofrecerán. El centro seguirá el modelo de Manchester Bidwell Corporation, una organización sin fines de lucro basada en Pittsburgh que ha colaborado con otras organizaciones para establecer centros en más de 10 ciudades en los Estados Unidos e Israel”.
La Fountain Christian Bilingual School, ligada al Concilio Misión Cristiana Fuente de Agua Viva, Inc. del reverendo Otoniel Font, comenzó por alquilar la Escuela Julia de Burgos de Carolina en 2018 hasta que en agosto la compró por $612,000 tras siete meses de trámites para que el CEBDI aprobara su propuesta.
Mil Máscaras Academy Inc., un colegio especializado en Bellas Artes, también comenzó en 2018 alquilando la Escuela Rafael Hernández hasta que en noviembre compró el plantel ubicado en Hormigueros por $240,000.
“Finalmente, el 22 de octubre se firmó el contrato [de compraventa]. Desde el 2017 estábamos bregando con esto. En enero aceptamos la contraoferta del Gobierno y en agosto fue que comenzaron a bregar las escrituras”, recordó la presidenta de la Academia CEIP Inc., María Da Silveira, sobre la Escuela Nereida Alicea Cruz de Caguas. “Allí dejaron escritorios, pupitres, pizarras, hasta un vagón”, pero por más que llamó al DE nunca fueron a buscar nada.
En Hato Rey, un plantel será ocupado por la Escuela de Enfermeras/os Anestesistas de Puerto Rico luego de que la Sociedad Española de Auxilio Mutuo adquiriera la Escuela Buena Vista para ubicar el programa de profesionales de enfermería.
Luz verde a propuestas comerciales
La compañía de David Barreto Bosques ofrece servicios de reparación a la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados (AAA). Como la Escuela Toribio Lasalle Bourdon de Moca queda cerca de su oficina, la compró por $38,000 “para guardar mis equipos y camiones”. Describió la estructura como “bien pequeña”. Estuvo cerrada más de 10 o 15 años, estaba bien abandonada”, aunque ya le hizo algunos arreglos. “Hubo que demoler el comedor y arreglé la verja. En terreno nada más invertí $10 mil porque está en zona inundable. Me acuerdo que cuando estudiaba aquí y llovía los maestros nos despachaban porque se inundaba todo y no había forma de salir. Cuando venga a terminar [las obras] me saldrá en 80 o 90 mil dólares”, detalló.
Otro comerciante que busca expandir su negocio con la adquisición de una escuela en San Sebastián es Daniel Sosa. Aunque aún no cierra el contrato de compraventa, esperando por la aprobación de un financiamiento del programa de negocios y cooperativas del área de desarrollo rural del Departamento de Agricultura federal, la Escuela Pedro Sánchez Delgado ya está identificada con un letrero que lee “Pronto Electromecánica Automotriz Sosa”.
“Esa escuela me la dieron hace como año y medio, pero los documentos no aparecían por ningún sitio. Me enviaron por cincuenta mil oficinas y nadie tenía ninguna información. Hace como tres o cuatro meses me llamaron que al fin están bregando con las escrituras”, contó al CPI el presidente de Empresas Playa Joyuda Inc., Julio C. Pérez Perichi, quien planifica expandir el Hotel Perichi’s con la adquisición de la Escuela Luis Muñiz Souffront de Cabo Rojo.
En Ponce, la Escuela Ramiro Colón Colón pudiera convertirse en algo similar a la hospedería de Joyuda. La compañía de interés limitado La Rambla Plaza propuso comprar el plantel hace casi un año para “espacios de oficinas, residencia para estudiantes o un pequeño hotel de 30 habitaciones”, respondió por escrito su presidente Leslie Derek Fleming Negrón. El corredor de bienes raíces y donante del PNP también dirige Del Mar Investments SE. Con esta compañía tiene contratos con el Gobierno desde 2013 por un total de $12,024,439, principalmente por alquiler de locales o inmuebles al DTOP, el municipio de Ponce y la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE).
Esta nota se publica en Metro gracias a una alianza con el Centro de Periodismo Investigativo. Puede acceder la versión orginal AQUÍ