La flexibilización gradual de las fases de vacunación contra el Covid-19 que se ha observado en Puerto Rico durante las pasadas semanas podría derivar en que al 1 de mayo sea viable cumplir con el objetivo del presidente Joe Biden de eliminar las restricciones existentes, a juicio de los actores gubernamentales a cargo del proceso.
La directora del Programa de Vacunación del Departamento de Salud, Iris Cardona, señaló que el ritmo actual de 100,000 primeras dosis administradas semanalmente permite pensar que dentro de los 37 días que restan para el 1 de mayo se habrá avanzado lo suficiente para contemplar el avance a la fase 2, en la que toda la población de 16 años o más es elegible para obtener un turno.
“El paso que llevamos es bueno porque vacuna que llega, vacuna que se distribuye. En 48 horas se despacha (a los proveedores) todo lo que llega. Tenemos muchos proveedores hábiles para vacunar, a diferencia de otros lugares que tienen los sistemas de salud comprometidos”, afirmó Cardona, quien detalló que la isla cuenta con 590 proveedores certificados.
Hasta el 22 de marzo, en Puerto Rico se había registrado la administración de al menos la primera dosis de la vacuna a 523,169 personas. A un ritmo de 100,000 vacunaciones semanales hasta finales del mes entrante, sobre un millón de puertorriqueños habría comenzado su ciclo de inoculación para el 1 de mayo, o poco menos de la mitad de los cerca de 2.2 millones de adultos elegibles para inmunizarse.
El presidente del Colegio de Médicos, Víctor Ramos, sin embargo, opinó que, si no aumenta el flujo de vacunas que se recibe actualmente, habrá que esperar un poco más para abrir definitivamente el proceso a toda la población.
“Las promesas, como las de todos los políticos, tienen que ir acompañadas de poner la acción donde ponen la palabra. Si tenemos la cantidad de vacunas se podrá hacer, si no, no. En la parte de enfermedades crónicas (grupo incluido en la subfase 1-C) son miles de personas, igual que la parte más grande de la 1-B eran los mayores de 65 (años). Tendría que haber una mayor cantidad, que se supone que va a haber. Pero hay que esperar a ver”, manifestó el pediatra.
Aunque se considera que al vacunar al 70% de la población adulta se habrá alcanzado la inmunidad de rebaño, el ayudante general de la Guardia Nacional, José Reyes, anticipó que en el país la cifra de personas inoculadas será superior.
“Estoy convencido que Puerto Rico va a alcanzar de un 80% a un 85%. Es lo que vemos en la calle, hay una gran disposición de la gente para vacunarse”, expresó Reyes.
Para el militar, Puerto Rico cuenta con la capacidad para administrar eficientemente un volumen mayor al que recibe actualmente, en caso de que el gobierno federal incrementara las asignaciones. La expectativa del Departamento de Salud es que aumente específicamente la asignación de vacunas de Johnson & Johnson, que solo requiere una dosis, pero de la cual apenas se recibieron 3,000 esta semana.
“En la medida en que seamos efectivos y se utilice al 100% la distribución que recibimos semanalmente, el número (de vacunas asignadas) va a aumentar. Yo visualizo que, de aquí a cuatro o seis semanas, ese número pueda aumentar a 120,000 o 130,000. Lo importante es seguir ese proceso de vacunación efectivamente”, sostuvo Reyes.
Lilliam Rodríguez, coordinadora de la Coalición Voces, organización que colabora con el gobierno en la realización de actividades masivas de vacunación, coincidió con Reyes en que el país cuenta con la estructura necesaria para manejar la posible avalancha de personas buscando turno para vacunarse, una vez se liberen las restricciones.
“Hemos estado en diálogos con el Departamento de Salud para que la persona pueda solicitar directamente la cita a través de (la plataforma) TurnosPR, que actualmente somos nosotros los proveedores quienes estamos programando las citas, lo cual entiendo agilizaría bastante el proceso. Según nos acercamos a las fases donde las personas son más digitales y están más acostumbradas a hacer diferentes ejercicios a través de internet, va a ser mucho más fácil”, subrayó Rodríguez.
“Actualmente (en la Guardia Nacional) tenemos cerca de 80 rutas, unos 68 vehículos que alquilamos para distribución y funciona muy bien de lunes a viernes. Tenemos la capacidad de extenderlo a sábados y domingos si así nos lo indica la misión que nos asigna el secretario de Salud”, planteó el ayudante general del cuerpo castrense.
Como parte de las flexibilizaciones, esta semana el Departamento de Salud anunció que, a partir del próximo lunes, los empleados de la cadena de alimentos y pacientes de 35 a 49 años con condiciones crónicas serían elegibles para vacunarse, así como todas las personas de 50 años o más.