Chile informó el viernes que alcanzó la mayor cifra de contagios en un día desde que comenzó la pandemia al registrar 7.626 nuevos casos, mientras los hospitales están saturados por la alta demanda de pacientes con COVID-19 en sus unidades de cuidados intensivos.
Durante la primera ola el máximo número de contagiados en un día había sido el 14 de junio con 6.398. Esta semana el país superó los 7.000 infectados en tres ocasiones y a diario ingresan entre 40 y 50 personas a las unidades de cuidados intensivos.
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“Hoy como comunidad médica tenemos temor de vernos sobrepasados, de no tener la capacidad para dar atención y hospitalizar a quien así lo requiera. Si eso ocurre, el riesgo de morir por COVID-19 aumenta, como también el de cualquier otra enfermedad grave como un accidente de tránsito, un infarto o un accidente cerebrovascular”, dijo Izkia Siches, la presidenta del gremio médico, en un vídeo que subió a internet.
El gobierno acudió a las cuarentenas extendidas para tratar de frenar los contagios. El sábado, 16 de los 19 millones de chilenos quedarán confinados, la mayoría en el gran Santiago. De ellos, 14 millones iniciaron el encierro hace una semana, pero esto no ha evitado que los contagios sigan en aumento al igual que los pacientes críticos.
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Otra medida del gobierno para obligar a los chilenos a permanecer en sus casas es la suspensión de los permisos de movilidad temporal para los sábados y domingos. Los últimos dos fines de semana la policía había extendido casi cuatro millones de pases. Los supermercados, ferias y pequeños comercios de productos alimenticios sólo podrán vender con despacho a domicilio.
La mayor preocupación de las autoridades está centrada en las 3.516 camas de uso crítico que hasta el jueves registraban una ocupación del 95%. En los próximos días se espera llegar a las 3.800, aunque escasea el personal de salud entrenado para manejarlas porque en torno del 20% está con licencia médica por agotamiento y enfermedad.
Chile ha vacunado a 6,2 millones de personas, incluido el 80% de los adultos mayores, pero aún es pronto para que las inmunizaciones se reflejen en los índices epidemiológicos. Autoridades y médicos señalaron que han disminuido levemente los ancianos que llegan a las unidades críticas pero que también se ha observado un mayor ingreso de pacientes menores de 59 años.
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Los expertos señalaron que los efectos de las cuarentenas no se observarán hasta dentro de dos o tres semanas porque la carga de los infectados que están activos -es decir, contagiando- es muy alta.
Hasta ahora Chile ha registrado más de 962.000 casos y 22.587 fallecidos por coronavirus, según el Centro de Ciencia e Ingeniería en Sistemas de la Universidad Johns Hopkins.