El excandidato a la gobernación, César Vázquez, sostuvo el lunes que, aunque entendía que la Autoridad de Energía Eléctrica necesitaba una transformación, “lo que se propone en el contrato con LUMA es indigno para nuestro pueblo”.
“Sabíamos que la Autoridad de Energía Eléctrica tenía que cambiar su modelo de brindar servicios. Un monopolio en quiebra, con un servicio pobre y para colmo caro no puede subsistir a menos que siga explotando económicamente a sus abonados. Una transformación real era necesaria. El contratar a alguien con experiencia en brindar servicio eléctrico para administrar era una buena alternativa. Pero botaron al bebé junto con el agua sucia”, expresó Vázquez en declaraciones escritas.
Además, comentó que el que LUMA Energy “no tenga que responder por negligencia crasa ni por daños intencionados es darle licencia para matar. Esto solo lo pide el que sabe que no puede dar el servicio correctamente. De hecho, aunque el activo sigue siendo del gobierno el que lo administra, LUMA, no asume su responsabilidad como representante del gobierno. De hecho, no está sujeto a muchas leyes que gobiernan la acción del ejecutivo. Aquí pudiera haber un conflicto de índole constitucional”.
“El atropello a los empleados es monumental. Ni tan siquiera garantizan empleo para todos los empleados de la autoridad y para colmo el gobierno tendrá que absorber a aquellos que no renuncien para irse con LUMA. El pueblo pagará por reembolso todas las plazas que necesite LUMA y a su vez le pagará a los que fueron empleados de Energía Eléctrica que se relocalicen a otras agencias”, añadió el presidente de Proyecto Dignidad.
Vázquez aseveró que es “obvio que el aumento en tarifas es inevitable y esto va a afectar nuestra maltrecha economía de manera significativa. Ellos, Luma, van a administrar los más de 10.000 millones de dólares para la reconstrucción de la infraestructura de energía eléctrica. Sin embargo, no van a ser fiscalizados ni responderán a ninguna dependencia del gobierno de Puerto Rico. Se habla que la autoridad para las APP los va a fiscalizar. Esta autoridad no tiene ni el personal ni el peritaje para llevar a cabo esta función”.
Asimismo, manifestó que “botó la bola por ineptitud el que negoció este contrato”.
Por otra parte, comentó que él le pediría la renuncia inmediata a la directiva de la Autoridad de Energía Eléctrica, excepto al ingeniero Tomás Torres Placa, pues entiende que, como representante del consumidor, Torres Placa “ha sido el único que ha dado la cara por el pueblo”.
Además, señaló que lo próximo que haría sería rescindir el contrato y pagar la penalidad.
“Que nos lleven al tribunal. Allí demostraríamos que esto es un contrato leonino contrario al mejor interés del pueblo de Puerto Rico y que bajo las circunstancias actuales el contratante no puede brindar el servicio para el cual fue contratado. En su defecto, retrasaría por lo menos 6 meses su puesta en vigor y volvería a la mesa de negociación. Definitivamente la Autoridad de Energía Eléctrica necesita una transformación para bien. Esto que se propone en el contrato con Luma no es transformación, es atropello”, puntualizó.