Los representantes novoprogresistas Ángel Morey y Víctor Parés, solicitaron que la Legislatura del Partido Popular Democrático (PPD) atienda, con premura, el Proyecto de la Cámara 700, medida del Ejecutivo, que busca atender la crisis del almacenamiento de neumáticos usados en Puerto Rico y el cual todavía no ha recibido ni una sola vista pública.
“La Cámara de Representantes no ha hecho nada para atender la crisis sobre las montañas de neumáticos que arropan nuestra Isla. Es como si no fuera importante la salud pública para la mayoría parlamentaria. Tienen en sus manos, desde el 30 de abril, el P de la C 700 el cual precisamente establece un ordenamiento nuevo para resolver este asunto, sin embargo, no le han dado ni una sola vista pública”, sentenció Morey, quien representa el Distrito #6 de Guaynabo, Cataño y Bayamón.
“La medida se encuentra desde el 1 de mayo durmiendo el sueño de los justos en la Comisión de Desarrollo Económico, Planificación, Telecomunicaciones, Alianzas Público-Privadas y Energía de la Cámara, no se ha movido para nada. No se ha celebrado ninguna vista, sea pública, ejecutiva u ocular; nada. No sabemos qué sucedió con esta medida, quizás no se atienda porque la radicó Fortaleza o es que el tema de las gomas no le interesa a la delegación del partido popular”, comentó Parés, representante por el Distrito #4 de San Juan.
Los legisladores novoprogresistas solicitaron que se atienda la medida durante la presente sesión legislativa que culmina el 30 de junio.
La pieza legislativa crearía la ‘Ley de Estándares de Seguridad de Gomas y Neumáticos’, a los fines de reglamentar la venta y utilización de neumáticos en la Isla; establece, además, unos estándares mínimos de calidad que deberán tener los neumáticos puestos a la venta e impone al Secretario del Departamento de Transportación y Obras Públicas la responsabilidad de promulgar aquella reglamentación que se entienda necesaria para asegurar su efectiva consecución.
En Puerto Rico se botan todos los días alrededor de unas 18 mil gomas usadas, lo que representa alrededor de 4.7 millones al año. Entre algunos de los efectos del almacenamiento de neumáticos en la intemperie-que suele ser la norma-se destaca la posibilidad de incendio, la propagación de mosquitos como el aedes aegypti, transmisor de los virus del dengue y chikungunya, su biodegradación es prolongada y propician el desarrollo de vertederos clandestinos.