Un potente deslave, con un torrente de agua lodosa y escombros, arremetió contra filas de viviendas en una ciudad al oeste de Tokio tras las fuertes lluvias del sábado y dejó al menos 19 desaparecidos, informaron las autoridades.
Hasta 80 viviendas quedaron completamente sepultadas en Atami, dijo un funcionario de la agencia de incendios y desastres.
El funcionario dijo que más personas, probablemente 100, pudieran seguir desaparecidas, pero advirtió que los detalles no estaban claros aún. El funcionario, que habló a condición de preservar el anonimato, como es usual en la burocracia japonesa, subrayó que proseguían las operaciones intensas de rescate para encontrar sobrevivientes.
Previamente, la televisora pública NHK dijo que el número de desaparecidos era 20, pero el portavoz de la prefectura de Shizuoka, Takamichi Sugiyama, dijo que se habían confirmado al menos 19, aunque admitió que la cifra pudiera subir.
Las lluvias torrenciales han azotado partes de Japón desde principios de semana. Los expertos dicen que la tierra se ha aflojado, lo que aumenta el riesgo de deslaves en un país lleno de montañas y valles.
Los aludes parecen haber ocurrido varias veces, a gran velocidad. Video mostró un poderoso deslave de lodo oscuro avanzando montaña abajo, derribando y aplastando casas y arrastrando automóviles. Vecinos horrorizados observaban impotentes, algunos grabando la escena con sus teléfonos.
Un video de NHK mostró un puente parcialmente derrumbado.
El gobernador de Shizuoka, Heita Kawakatsu, dijo a reporteros que la Guardia Costera descubrió a dos personas que fueron arrastradas al mar por un deslave. Sus corazones no latían, pero dijo que no fueron declarados muertos oficialmente. No se revelaron otros detalles de su identidad.
“Ofrezco mis profundas condolencias a todos los que han sufrido”, dijo, antes de añadir que se estaban haciendo todos los esfuerzos para salvar vidas.
Mira el impresionante vídeo:
Kawakatsu y otros funcionarios dijeron que había estado lloviendo muy intensamente en el área toda la mañana. Miembros de las fuerzas de autodefensa se han sumado a los bomberos y la policía en las labores de rescate y también llegaron al área funcionarios del gobierno nacional, dijeron.
El primer ministro Yoshihide Suga convocó a una reunión de emergencia del gabinete y le instruyó a la fuerza especial que prosiguiera con las operaciones de rescate al tiempo que se protegía contra más de esos desastres.
Se emitieron órdenes de evacuación para un área amplia, incluso el nivel 5, que es la alerta más elevada, afectando a 35.000 personas.
Atami es un pintoresco balneario de montaña en la prefectura de Shizuoka, unos 100 km (60 millas) al suroeste de Tokio. En la zona afectada por el deslave, Izusan, hay centros termales, zonas residenciales, calles comerciales y un santuario.