El plan de ajuste para reestructurar unos $35,000 millones de la deuda del país venció hoy su primer obstáculo luego de que la jueza Laura Taylor Swain avaló hoy de forma preliminar la declaración informativa del plan de ajuste de la deuda.
En esencia, dicho documento contiene los términos y condiciones del acuerdo y que proveen información suficiente a los acreedores elegibles a votar.
Sin embargo, la jueza advirtió que la Junta y el gobierno local deben continuar las negociaciones para alcanzar un acuerdo en torno al plan que reestructuraría dicha porción de la deuda pública gubernamental. Incluso, la jueza indicó a la Junta que deben especificar en dicha declaración los riesgos que surgen debido a que la Legislatura no avale dicho plan de ajuste ya que podría tener un efecto en la manera en que votan los acreedores.
Swain cuestionó si el acuerdo no sería “factible” si no se obtienen acuerdos con la Legislatura y el gobierno en torno a una futura emisión de bonos.
Asimismo, la jueza le pidió al abogado de la Junta, Martin Bienenstock, a que planteara un Plan B en caso de que la Junta no pueda ejecutar dicho plan de ajuste de la deuda sin el aval de la Legislatura. La Junta ha planteado en repetidas ocasiones que no necesita el cedazo legislativo para que emitir nuevos bonos una vez se apruebe el plan de reestructuración. El abogado se limitó a plantear que consultarán con oficiales del Servicio de Rentas Internas en torno a las posibilidades de que esos nuevos bonos estén exentos de impuestos.
Ante esto, Swain les pidió que incluyeran en dicha Declaración los riesgos de que no consigan el aval de la Legislatura y el gobierno ya que esto podría provocar que el plan no sea ’confirmable’. Asimismo, insistió en que el gobierno y la Junta deben cooperar para alcanzar una solución. Inclusive, comentó que, de detectar que las partes no están cooperando o que están dilatando los proceso, estaría dispuesta a alterar las fechas del proceso de confirmación del plan de ajuste y atrasarlo aún más. Se espera que la vista de confirmación del plan se celebre en noviembre de este año.
Durante su alocución, la togada indicó que, si bien la declaración informativa contiene algunas “deficiencias”, el documento satisface los requerimientos del Tribunal y que las objeciones no pudieron probar que el plan de ajuste de la deuda no sea viable. Comentó que los defectos de la Declaración podrán ser atendidas por la Junta.
La aprobación de la declaración informativa abre el camino para que comience el proceso de confirmación del plan de ajuste para reestructurar $35,000 millones de la deuda del país. Los acreedores y bonistas tendrán hasta el 4 de octubre para votar en torno a dicho pacto. La determinación de Swain, en cambio, no se traduce en un aval al plan de ajuste de la deuda ya que este deberá ser consultado con los acreedores en un proceso de votación y estará sujeto a un proceso legal en el que se podrían continuar levantando objeciones en contra de la confirmación de dicho acuerdo.
El respaldo de Swain a la declaración informativa también depende del acuerdo “en principio” entre la Junta y las aseguradoras Ambac y Financial Guaranty.