Un sacerdote de 40 años fue detenido en Italia, luego de que fuera acusado de organizar orgías, y además, financiadas con dinero de los propios fieles.
El sacerdote Francesco Spagnesi habría comprado droga que consumía en fiestas sexuales junto a su amante y cómplice, Alessio Regina, también detenido, y a otras personas que conocía a través de páginas web de encuentros sexuales.
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A esta doble vida se añade ahora una acusación de tentativa de lesiones graves al ser seropositivo y no informar a sus parejas sexuales.
Esta conducta se suma al hecho de que Spagnesi compraba y distribuía cocaína y GBL, un potente narcótico variante del GHB, la llamada ‘droga de la violación’, que importaba ilegalmente desde Holanda.
Frente a este revuelo, el obispo de Prato, Giovanni Nerbini, emitió un comunicado en que expresó su consternación por el suceso, agregando que hace un tiempo se conocía que el párroco se encontraba bajo “un fuerte estado de sufrimiento físico y psicológico, pero nadie podría haber imaginado que tuviera problemas de drogadicción“.
Las sospechas del estado del sacerdote, así como movimientos extraños en las cuentas parroquiales, dieron paso a que la diócesis decidiera retirar el poder de firma de Spagnesi a comienzos de septiembre, hasta que se concretó su detención hace una semana.
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