Un tribunal ruso ordenó el sábado que cinco personas permanezcan detenidas durante dos meses previo a su juicio mientras se desarrolla una investigación sobre la devastadora explosión en una mina de carbón en Siberia en la que murieron decenas de personas.
Las autoridades rusas reportaron 51 muertes — 46 mineros y cinco rescatistas— luego que la explosión de metano agitara la mina Listvyazhnaya en la región de Kemerovo, en el suroeste de Siberia, el jueves. La tragedia parece ser la más mortífera en Rusia desde 2010.
La Corte Central de Tribunal en la ciudad de Kemerovo decidió encarcelar al director de la mina Listvyazhnaya, Sergei Makhrakov, al vicedirector Andrei Molostvov y al supervisor de la sección Sergei Gerasimenok. Se enfrentan a cargos de infringir requisitos de seguridad industrial para instalaciones de producción peligrosas que resultó en múltiples muertes. De ser condenados, podrían recibir una sentencia de hasta siete años en prisión.
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Dos funcionarios de la rama local de Rostekhnadzor, el supervisor estatal de Tecnología y Ecología de Rusia —Sergei Vinokurov y Vyacheslav Semykin — también han sido encarcelados durante dos meses bajo el cargo de negligencia que ocasionó dos o más muertes, también penado con hasta siete años en prisión.
Funcionarios de agencias policiales señalaron el viernes que los mineros se habían quejado de los altos niveles de metano en la mina. El principal sitio de noticias independiente de Rusia, Meduza, reportó que este año las autoridades suspendieron el trabajo de ciertas secciones de la mina nueve veces y emitieron multas por más de cuatro millones de rublos (aproximadamente 53.000 dólares) por infracciones de seguridad.
Un total de 285 mineros estaban en la mina Listvyazhnaya la mañana del jueves cuando fue la explosión, que rápidamente llenó la mina con humo tóxico. Un total de 239 personas fueron rescatadas poco después de la explosión y más de 60 buscaron asistencia médica por una variedad de lesiones.
El jueves, funcionarios dijeron que 11 mineros y tres rescatistas fallecieron mientras buscaban a otras personas en una sección remota de la mina. Para cuando los rescatistas se vieron obligados a detener la búsqueda varias horas después por una concentración de metano y monóxido de carbono, 35 mineros todavía estaban atrapados en la mina.
