Luego de un año de estabilización del mercado laboral y de la recuperación en algunos sectores económicos tras el disloque ocasionado por la pandemia del Coronavirus, es posible esperar un crecimiento económico moderado de 2.0 por ciento para el cierre del año fiscal 2022, según indicó este jueves, Estudios Técnicos, Inc (ETI).
“El desempeño favorable que experimentó la economía de Puerto Rico en el 2021 estuvo influenciado en gran medida por el desembolso de fondos de estímulo federal para contrarrestar la pérdida de ingresos de los individuos y retener empleos. Estos fondos apoyaron el consumo privado, fomentaron el crecimiento en áreas claves, por ejemplo, la actividad comercial y el turismo, y ayudaron a estabilizar el mercado laboral. Sin embargo, el vencimiento de los programas de estímulo federal supone una normalización en la actividad económica a niveles pre-pandemia en el corto plazo. De aquí, la importancia de que comiencen a desembolsarse gradualmente los fondos federales de reconstrucción para continuar apoyando el ritmo de actividad económica que ha experimentado la Isla durante el último año”, informó Graham Castillo, presidente de ETI en declaraciones escritas.
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Estudios Técnicos, Inc. anticipa un crecimiento económico de 2.0 por ciento a precios constantes al cerrar el año fiscal 2022 y 1.1 por ciento en el año fiscal 2023. Castillo destacó que, aunque el desembolso de los fondos de recuperación y reconstrucción serán instrumentales para reactivar la inversión en construcción y promover la creación de empleos, es posible esperar una ralentización en el crecimiento económico para el año fiscal 2023.
Según explicó Leslie Adames, director de la División de Análisis y Política Económica de ETI, la tendencia alcista en la inflación, la efectividad con la que el gobierno maneje el repunte en las infecciones de personas con la variante Omicron del coronavirus, y el aumento esperado en las tasas de interés por la Reserva Federal, son factores de riesgos que afectarán el consumo y la inversión en el corto plazo. “Muchos países han comenzado nuevamente a prohibir la entrada de turistas ante el repunte en los casos de contagios con la variante Omicron, algo que podría continuar favoreciendo el turismo local y la actividad comercial en la medida en que no se implementen medidas más restrictivas en la Isla. Sin embargo, la incertidumbre en torno a la aprobación de nuevos estímulos por parte del gobierno federal y la erosión en el poder adquisitivo del consumidor debido al repunte en la inflación afectará el crecimiento en el consumo privado”, indicó Adames.
Por su parte, José Joaquín Villamil, fundador y Presidente de la Junta de Directores de ETI, comentó que “es importante para Puerto Rico, no depender únicamente de la inyección en fondos federales para fomentar el crecimiento económico. Tiene que articularse un plan de desarrollo económico a mediano y largo plazo que permita, entre otras cosas, fomentar el desarrollo del capital humano, la creación de capital doméstico, potenciar las Pymes, y diseñar una política industrial que permita crear eslabonamientos entre las empresas multinacionales y las empresas locales”.
“Aunque ha habido progreso en el tema de la deuda, falta mucho por hacer para transformar la economía y lograr un crecimiento sostenido de la economía en el mediano y largo plazo que propenda una mejor calidad de vida para todos”, planteó Villamil.