El censo de personal y camas destinadas a pacientes de Covid-19 que el Departamento de Salud solicitó a los 65 hospitales del país arrojó que, al menos el pasado viernes, había instituciones operando con la ausencia de entre 20% y 25% de sus profesionales de enfermería.
Pese a ese dato, en una entrevista con varios medios de comunicación, el director de la Secretaría Auxiliar de Reglamentación y Administración de Facilidades de Salud (Sarafs), Edwin León Pérez, aseguró que, a base de la información provista por los administradores, cada uno de los 65 hospitales aparentaba estar funcionando de manera “eficiente” en medio de las cifras récord de hospitalizaciones por Covid-19 en el país.
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“De un análisis preliminar de la ‘data’, yo te puedo decir que todos. Me preguntaste cuáles hospitales, si alguno, estaba operando por debajo del nivel de eficiencia dada el ausentismo. De la ‘data’ que pudimos recuperar, ninguno estaba operando por debajo de ese nivel”, subrayó León Pérez.
A lo largo de su conversación con los medios, León Pérez insistió que cada hospital tiene mano libre para determinar cuánto personal necesita para atender su capacidad máxima de pacientes, y que la supervisión de Sarafs se concentra principalmente en el tema de las condiciones de la planta física.
“Las necesidades de cada facilidad son distintas y el censo de cada hospital es distinto. Si de repente, luego de la hora del reporte, esa facilidad de salud experimenta un aumento en las necesidades que le tiene que exigir a cada profesional de enfermería, eso (una sobrecarga) puede ocurrir. Y de que el profesional de la salud se puede ver extenuado porque lleva más de 12, 16 horas corridas laborando, sí, eso puede suceder. Pero no confundas una cosa con la otra, según la ‘data’ que ellos reportan, están a nivel de eficiencia”, afirmó el secretario auxiliar.
El jueves pasado, el secretario de Salud, Carlos Mellado, dijo en una rueda de prensa que el informe solicitado a los hospitales debía incluir la cantidad de camas disponibles, las camas destinadas a pacientes de Covid-19, el personal habitualmente disponible y el total de profesionales que se habían ausentado debido a un contagio o contacto con una persona infectada con el virus.
La oficina de prensa de Salud detalló que, al momento del informe el pasado 14 de enero, de 9,313 enfermeros y enfermeras en la plantilla de los 65 hospitales, había 901 ausentes, para un 9.7%. Desde que comenzó a mediados de diciembre el repunte de Covid-19, impulsado por la altamente transmisible variante Ómicron, han sido constantes las denuncias de carencia de personal de salud, toda vez que estos profesionales no han estado exentos de contagios que los obligan a permanecer en aislamiento.
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El caso más extremo, en el censo del pasado viernes, se registró en un hospital de Aguadilla, que tuvo la baja de 31 miembros de su plantilla de enfermería, dijo León Pérez.
León Pérez aceptó que, tras casi dos años de emergencia salubrista, existe un alto nivel de cansancio entre los profesionales de la salud. Sin embargo, señaló que, en el caso particular del personal de enfermería, es normal que trabajen turnos en exceso de 12 horas, pese a que ese escenario llevó, en pasados días, a un grupo de estos profesionales a manifestarse frente a La Fortaleza.
“De ordinario el turno de un profesional de enfermería es de más de 12 horas, o sea, que los turnos no se han alterado. […] Están extenuados y todo eso se comprende. Obviamente, todo ese cansancio profesional y mental viene producto de lo que es una pandemia, tener profesionales de salud y enfermería que llevan trabajando meses sin un día de vacaciones. Esos son héroes de verdad”, dijo el funcionario.
León Pérez agregó que, a nivel del Departamento de Salud, se están considerando diversas iniciativas para “repensar” los turnos de trabajo de enfermería. Una de las alternativas, dijo, sería proveer “licencias temporeras” a enfermeros recién graduados para que puedan incorporarse de manera expedita a los hospitales.
“Se está pensando cómo se puede recalendarizar el horario de ese tipo de profesional para no crear tanto cansancio mental y desgaste”, dijo León Pérez.
El jueves pasado, el gobernador Pedro Pierluisi anunció un incentivo de $600 para todos los profesionales de la salud que laboren en hospitales y hayan tenido ingresos menores de $55,000 en 2021.
Aunque Salud confirmó la ausencia de sobre 900 enfermeros y enfermeras a sus labores el pasado viernes, al cierre de esta edición no se había precisado en cuántos hospitales dicha cifra superó el 20% de la plantilla. La agencia se comprometió a ofrecer la información en el día de hoy, así como más detalles a nivel de las regiones.
Según León Pérez, Sarafs no puede identificar públicamente a los hospitales que atraviesan este tipo de situación porque se trata de información “sensitiva”.
Precisamente, el viernes pasado, cuando se hizo el censo, fue el día que se estableció un récord de hospitalizaciones por Covid-19, con 936. De acuerdo con el Departamento de Salud, la ocupación general de los hospitales esa fecha fue de 61%, similar a la que se ha observado en las instituciones a lo largo de la pandemia.
Incluso ante los problemas de ausentismo a consecuencia del Covid-19, León Pérez aseguró que los hospitales tendrían los recursos para atender adecuadamente a todos los pacientes en un escenario en que se llenaran a capacidad. La cantidad de camas de adultos en el país ronda las 7,000, mientras que hay unas 650 camas pediátricas.
León Pérez sí puntualizó que una de las observaciones de Sarafs, a base de los datos recopilados, es que muchas instalaciones tienen capacidad para añadir más camas destinadas a pacientes de Covid-19, en momentos en que al menos una de cada cinco personas admitidas se encuentra contagiada con el virus.
Para evitar contagios adicionales, se requiere que los pacientes con Covid-19 sean ubicados en los llamados cuartos de presión negativa, al tiempo que los médicos y enfermeros que los atienden deben portar protección adicional al atenderlos.
“Fue mi observación que pudiera reforzarse esa variable. Ahora bien, no son todos (los hospitales). Qué me lleva a alcanzar esa conclusión, pues el hecho de comparar el número de camas en uso con el número de camas que le dedican a pacientes que resultan positivo a Covid-19”, expresó León Pérez, al negar que hayan identificado casos de pacientes contagiados ubicados en salas sin las especificaciones requeridas.
El hospital con más camas habilitadas para pacientes de Covid-19 cuenta con 52, precisó el jefe de Sarafs.
Pocos recursos en Sarafs
Por otra parte, León Pérez admitió que la división dentro de Sarafs que se encarga de fiscalizar el funcionamiento de los hospitales apenas cuenta con ocho inspectores. Además de los 65 hospitales, ese grupo de inspectores tiene a su cargo realizar evaluaciones y atender querellas en lugares como hospicios, centros de diálisis, centros de cuido prolongado, centros de rehabilitación, clínicas de abortos, salas de emergencia, y centros de cirugía ambulatoria, que en conjunto representan unas 450 instalaciones.
Debido a ello, dijo el funcionario, la dependencia se limita a realizar inspecciones periódicas de las instalaciones de salud y únicamente hace visitas sorpresa cuando se recibe una querella.
Según León Pérez, desde el inicio de diciembre, Sarafs ha realizado “menos de cinco” inspecciones tras recibir querellas relacionadas a hospitales, mayormente por quejas sobre la planta física.
“Estamos en un déficit de personal”, reconoció León Pérez, al añadir que el presupuesto de Sarafs para este año fiscal ronda los $1.2 millones, de los cuales el “85%” se destina a nómina.
Según el secretario auxiliar, a inicios del pasado cuatrienio el presupuesto anual para la subdivisión se acercaba a los $2 millones.
