El precio bajó de 4.50 euros a 1.40, descuento que provocó la histeria entre los compradores, al punto de que los supermercados se vieron en la necesidad de llamar a la policía.
El precio bajó de 4.50 euros a 1.40, descuento que provocó la histeria entre los compradores, al punto de que los supermercados se vieron en la necesidad de llamar a la policía.