La plataforma social X, anteriormente conocida como Twitter, ha implementado un cambio en la manera en que funciona su herramienta de bloqueo.
Antes de este cambio, la función de bloqueo permitía que cualquier usuario evitara que una persona bloqueada viera sus publicaciones.
Esto proporcionaba un nivel de protección al impedir que alguien que se consideraba problemático tuviera acceso al contenido publicado. Sin embargo, con la nueva actualización, bloquear a alguien en X ya no tiene el mismo efecto.
Ahora, las personas bloqueadas seguirán teniendo acceso a las publicaciones públicas de la cuenta que los bloqueó, pero no podrán interactuar con ellas. Esto significa que no podrán dar “me gusta”, responder o compartir los tweets, aunque seguirán siendo espectadores de todo el contenido público.
Ante este cambio, la única opción para los usuarios que desean mantener sus publicaciones alejadas de personas no deseadas es proteger su cuenta. Esta función permite que solo los seguidores aprobados puedan ver las publicaciones.
Aunque esta medida brinda mayor control, limita significativamente la capacidad de alcanzar a una audiencia más amplia, ya que los tweets protegidos no son accesibles para el público general. Esta nueva configuración de bloqueo ha sido diseñada en parte para aumentar la “transparencia”, según el propio Elon Musk y su equipo.
La comunidad de X ha reaccionado de manera variada a este cambio. Algunos usuarios consideran positivo el hecho de que ahora podrán seguir viendo publicaciones de personas que los hayan bloqueado, eliminando una barrera de acceso que antes existía.
Sin embargo, para aquellos que han bloqueado cuentas por razones de acoso o comentarios no deseados, esta modificación ha generado gran preocupación.
Aunque la función de bloqueo ya tenía limitaciones, este nuevo enfoque parece haber debilitado una herramienta esencial para la seguridad en línea.
