Elon Musk ha desatado una nueva polémica pero ahora, no dentro del mundo de la política o el espacio, si no criticando al avión caza de combate F-35, uno de los aviones militares más avanzados del mundo.
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Musk los ve como obsoletos y apuesta por la implementación de drones
El F-35, desarrollado por Lockheed Martin, empresa especializada en tecnología de defensa, es considerado por muchos como la punta de lanza de la aviación militar del siglo XXI. Su capacidad de stealth, su avanzado sistema de armas y su integración en redes de combate lo convierten en una herramienta letal en el campo de batalla. Sin embargo, Musk sostiene que esta tecnología ya está obsoleta y que los drones ofrecen una alternativa más eficiente y económica.
La polémica la desató una publicación de Musk vía X, donde compartía un video de cientos de drones volando en formación, insinuando que esta tecnología representa el futuro de la guerra aérea. El empresario ha argumentado que el F-35 es un proyecto fallido, demasiado complejo y costoso, que ha sacrificado la eficiencia en aras de una versatilidad excesiva.
Estas críticas han coincidido con la publicación de un informe del Pentágono que revela problemas de fiabilidad y mantenimiento en el F-35. El informe señala retrasos en las reparaciones, problemas con el cañón y un sistema de refrigeración sobrecargado que acorta la vida útil del motor. Estas revelaciones han dado munición a los críticos del programa, quienes argumentan que este caza es un proyecto que ha sobrepasado su presupuesto y no cumple con las expectativas.
Por su parte, Lockheed Martin ha defendido el F-35, asegurando que el avión cumple con los requisitos de rendimiento y fiabilidad establecidos por el Departamento de Defensa. Sin embargo, los críticos señalan que los problemas identificados en el informe son graves y requieren una revisión profunda del programa.
