Oprah Winfrey y Dwayne “The Rock” Johnson destinarán 10 millones de dólares a través de un nuevo fondo para realizar pagos directos a las personas en Maui que no pueden regresar a sus hogares por los incendios forestales.
People’s Fund of Maui, el fondo anunciado el jueves, dará 1.200 dólares al mes a adultos que no puedan volver a sus residencias principales por los incendios forestales recientes, incluidas las personas que poseen y alquilan sus hogares, según el sitio web del fondo. También buscará donaciones para extender el tiempo que puede brindar apoyo.
“¿Cómo ayudamos?”, recordó el astro de “Young Rock” sobre el momento en el que él y Winfrey se preguntaron ante los incendios forestales, en un video publicado junto con el anuncio del fondo. Señalaron que lucharon por encontrar la mejor manera de dirigir sus esfuerzos. “Quieres atender la mayor necesidad de la gente y eso es darles dinero”.
Ambos esperan con ansias la ayuda de “todas las personas que me llamaron y me dijeron: ‘¿Qué puedo hacer?’”, dijo Winfrey en el video. “Esto es lo que puedes hacer”.
El par se inspiró en un fondo similar creado por Dolly Parton después de que incendios forestales arrasaran Gatlinburg, Tennessee, en diciembre de 2016, cobrando la vida de 14 personas y destruyendo 2.400 estructuras.
Jeff Conyers, presidente de la Fundación Dollywood, dijo que consultó con el equipo de Winfrey varias veces en las últimas semanas para compartir las lecciones aprendidas al administrar el fondo, que finalmente otorgó 11 millones de dólares a familias que habían perdido sus hogares.
“La idea de Dolly fue: ‘Mira, esta es mi gente y quiero cuidarlos y confiamos en que sabrán cómo será la recuperación para ellos y sus familias en los días y semanas posteriores a esta catástrofe inmediata”, Dijo Conyers.
El fondo de Parton, llamado My People Fund, trabajó con socorristas y una empresa de servicios públicos local y pidió a los residentes que ayudaran a determinar qué estructuras fueron destruidas y quiénes vivían en esas casas, dijo Conyers. Unas 1.000 familias recibieron ayuda del fondo, según una evaluación de la Facultad de Trabajo Social de la Universidad de Tennessee en Knoxville. Eso incluyó una transferencia final de una suma total de 5.000 al final de seis meses.
Para calificar para el People’s Fund of Maui, los solicitantes deben mostrar una identificación oficial y una factura de servicios públicos a su nombre para una residencia perdida o inhabitable, según el sitio web del fondo.
Winfrey, que vive parte del año en Maui, visitó un refugio en la isla en los días posteriores al incendio forestal y le preocupaba hacer llegar recursos a los residentes de manera efectiva. Al menos 115 personas murieron en los incendios, aunque un número desconocido sigue desaparecido. El incendio que arrasó la histórica ciudad de Lahaina el 8 de agosto fue el más mortífero en Estados Unidos en más de un siglo.
Meteorólogos advirtieron el miércoles de ráfagas de viento y la baja humedad que aumentaron el riesgo de que se propagaran incendios rápidamente en las partes occidentales de cada isla hawaiana, aunque no fueron tan poderosos como los vientos que ayudaron a alimentar el incendio mortal hace tres semanas.
En el anuncio, Winfrey y Johnson dijeron que consultaron con “ancianos, líderes y residentes de la comunidad” entre los que están el productor de cine Shep Gordon y el actor Jason Momoa.
Entertainment Industry Foundation, una organización sin fines de lucro con sede en Los Ángeles que ayuda a celebridades a administrar su trabajo benéfico, patrocina el fondo, según el anuncio.
Johnson y Winfrey esperan que el fondo continúe realizando transferencias a residentes calificados durante al menos seis meses, pero Winfrey dijo que correspondería al público estadounidense determinar cuánto tiempo se extenderá el fondo, en función de su apoyo y donaciones.
Al establecer un programa de transferencia directa de efectivo, es importante definir el objetivo, dijo Holly Welcome Radice, representante regional para las Américas de CALP Network, un colectivo de organizaciones que estudia programas de asistencia en efectivo. En este caso, 1.200 dólares deberían corresponder al precio de la vivienda o al costo de vida de un adulto en la zona o cualquiera que sea la necesidad que el fondo busque cubrir, dijo.
“El objetivo será difícil de alcanzar si el valor de su transferencia no está conectado con la realidad de la gente”, dijo, añadiendo que el fondo debería considerar si la economía local puede responder al flujo de dinero y planificar qué otros servicios pueden ofrecer las personas de acuerdo con sus necesidades.
“Si es factible y apropiado, entonces el efectivo es una forma muy directa para que las personas se beneficien y tengan poder de acción”, dijo Radice.
El fondo también debería dedicar tiempo a comunicar claramente los parámetros del programa, dijo, “para que la gente entienda quién califica y por qué califica y asegurarse de que exista algún tipo de mecanismo de retroalimentación donde la gente pueda presentar sus quejas”.