Al tiempo que se desarrollan luchas ambientales por la conservación de reservas naturales en Salinas y Guánica, una nueva denuncia surge desde Humacao. Líderes comunitarios de la zona en el litoral Este advirtieron sobre consultas de permisos para proyectos propuestos en el área de la Reserva Natural Punta Santiago en Humacao.
El presidente ejecutivo del Programa de Educación Comunal de Entrega y Servicio (PECES), José Javier Oquendo, junto con la licenciada Sharee Santana Fuxench, de la organización comunitaria Careyes y la educadora ambiental Samerith Sánchez hicieron un llamado al Departamento de Recursos Naturales y Ambientales (DRNA) para que tome acción ante la preocupación de dos proyectos de desarrollo en Punta Santiago. Según aseguraron, al momento vigilantes del DRNA detuvieron los mismos una vez recibieron las denuncias.
Oquendo explicó a Metro que al momento hay consultas para permisos, pero no hay permisos, por lo que es preocupante que se diera inicio a movimiento de terreno en preparación para construcción. Sin embargo, los documentos revisados apuntan a que los permisos fueron aprobados.
“Aunque son terrenos privados, están dentro del entorno de la reserva y en ese sentido estamos hablando de que cualquier cosa que se haga va a afectar lo que es la actividad de la reserva y el ecosistema que está ahí”, sostuvo Oquendo.
La denuncia inicial de este caso se hizo a través de WALO Radio. “El alcalde (de Humacao, Reinaldo Vargas) está trabajando directamente, él se ha comunicado con nosotros diciendo ‘yo no tengo esa permisología en el municipio, eso se está trabajando a nivel de San Juan’”, aseguró el presidente de PECES.
Metro habló ayer con el alcalde de Humacao, Reinaldo Vargas, durante una vista pública cameral a la que compareció. El ejecutivo municipal confirmó que los proyectos en efecto están en etapa de consultas para permisos. Aunque la preocupación llegó a Vargas Rodríguez, este aseguró que no ve ese tipo de proyectos por lo que refirió el asunto a la Oficina de Gerencia y Permisos para que trabajen las consultas en el contexto de las preocupaciones de la comunidad.
El desarrollo comenzó en un área cercana a la reserva, “cruzando la calle”, según dijo el líder comunitario de PECES.
Uno de los dos proyectos es un Parque Familiar Ecológico “sin impacto ambiental”, dice el rótulo. Se identifica al dueño como Heriberto Sánchez Pedraza y el proyectista es el ingeniero Arturo Vázquez Cancel.
Se detalla que ante la Oficina de Permisos está sometida “la Consulta para Construcción para Operar un Comercial tipo Recreacional Artesanal Familiar para operar un parque recreativo con kioscos para gastronomía, artesanía, piscinas inflables, kayaks, actividades ecoturísticas y futura área para go-karts, entre otras actividades de carácter recreativas familiares”.
El otro proyecto se llama “Pollito Pio Farm” y se identifica al dueño como Jason N. Cortez. Este propone “la construcción de un estacionamiento pavimentado para empleados y clientes del consumo agrícola, área para preservar la cosecha de la producción de los invernaderos, un establo de caballos para usos agrícolas y turísticos, un zoológico de pequeños animales para usos científicos y escolares al cual los estudiantes de la Universidad de Puerto Rico que están estudiando para ser veterinarios puedan hacer su práctica, lagos artificiales para la recolección de aguas y desperdicios de los animales y usos hidropónicos para desarrollos como Specialty Crop Block Grant Program (SCBGP) del Departamento de Agricultura, 35 invernaderos de 3 pies de profundidad para retener las estructuras contra los elementos, 35 contenedores para usos turísticos y sistema solar para el desarrollo de energía renovable”.
“Es una propiedad privada, como si en las propiedades privadas se pudiera hacer de todo, pero no, hay que partir de que en las propiedades privadas aplican unos permisos que tienen que ir cónsonos con la Junta de Planificación, con lo que estipula Recursos Naturales y con lo que es una zonificación como lo es la Reserva Natural. La proximidad es tan cercana que me atrevo a decir, sin poder certificarlo, que está dentro de la reserva”, indicó Oquendo.
Añadió que, como parte de los proyectos estarían desarrollando las lagunas Mandri que son “las más sensitivas que tenemos”.
En términos de impacto ambiental, Oquendo aseguró que hay especies en peligro de extinción en la reserva que se pondrían en riesgo.
“Sabemos que las zonas costeras las califican de inundables para la gente de pocos recursos, pero también para la gente que tiene capital se puede tornar en una zona de gran atractivo. Nosotros hemos tratado de mantener el área para que sea una turística y de desarrollo económico. No hay por qué reñir una cosa con la otra, y en ese sentido hemos sido siempre vigilantes a tratar de mantener la reserva, los espacios naturales, bien protegidos. Ese ha sido el afán de la comunidad y son ellos los que nos levantan la voz de alerta”, señaló Oquendo.