En el segundo día del juicio federal por corrupción que enfrenta el exalcalde de Guaynabo Ángel Pérez Otero, la Fiscalía federal presentó los tres videos que presuntamente muestran al acusado aceptar sobornos en efectivo y el convicto exalcalde de Cataño, Félix “El Cano” Delgado Montalvo, se sentó a testificar sobre la relación que mantuvo con el exejecutivo municipal.
En la parte vespertina de hoy, viernes, el Ministerio Público sentó a Miguel Rodríguez, agente especial del Negociado Federal de Investigaciones (FBI), quien labora en la división anticorrupción que tiene la dependencia.
Mientras fue interrogado por el fiscal federal Nicholas Warren Cannon, Rodríguez detalló el contenido de tres videos y múltiples imágenes que tomaron las autoridades federales durante reuniones que sostuvo Pérez Otero con el abogado Oscar Santamaría.
Al momento que captaron las imágenes, entre mayo y agosto de 2021, Santamaría ya estaba cooperando con el FBI y acudió alambrado, según el agente, para entregarle sobres con $5 mil que solía entregarle al exalcalde como soborno.
En cada una de las instancias en que el alcalde fue captaron, lo hicieron con múltiples cámaras para asegurarse de capturar la transacción desde múltiples ángulos.
“Desde nuestra experiencia, en estas interacciones, los individuos están nerviosos y le damos más de un dispositivo para estar seguros de que captemos lo que buscamos”, expresó Rodríguez a preguntas del fiscal federal.
“Tenemos cámaras en el vehículo y si pasa en el restaurante, tenemos a Oscar Santamaría con cámaras”, agregó.
En efecto, el primer video, grabado el 19 de mayo de 2021, muestra, desde la perspectiva de Santamaría, al cooperador entrando al restaurante Café Shots y esperar por la llegada de Pérez Otero, quien estaba en una llamada telefónica. Acto seguido, cuando se sentó al frente, Santamaría bajó la cámara a la parte inferior de la mesa para mostrar cuando Pérez Otero agarró el sobre con dinero y se lo acomodó en su chaqueta.
El otro video, captado en el interior del vehículo de Santamaría, fue grabado el 1 de julio y mostró a Pérez Otero entrar al carro de este mientras conversaba con Santamaría. En ese entonces, el acusado recibe un sobre con dinero.
En el tercer video, grabado en agosto 19 de 2021, mostró, nuevamente, a Pérez Otero entrar a un vehículo junto a Santamaría.
En el video quedó captado cómo Pérez Otero obtuvo otro sobre de $5 mil. Según Rodríguez, el exalcalde luego pasó a acomodar el sobre en su media, pero aunque se ve un movimiento que podría inducir a esto, no se ve del todo en las imágenes mostradas como evidencia en el Tribunal federal, en Hato rey. .
“Cano” le habría dado trabajo a esposa de Pérez Otero
En la mañana, ambas partes tuvieron la oportunidad de interrogar a Delgado Montalvo sobre los favores políticos que supuestamente hizo para obtener la gracia de Pérez Otero, una figura a la que describió como muy “poderosa” dado a que presidía la Federación de Alcaldes.
Según el testigo, cuando fungía como alcalde de Cataño y tesorero de la Federación, Santamaría se le acercó para que él le concediera un puesto a la esposa de Pérez Otero, Liza Fernández, como abogada del ayuntamiento.
“No necesitábamos los servicios, pero para hacerle un favor a Oscar Santamaría… Pues accedo a ayudar a mi amigo que me lo había pedido y para estar bien con Ángel Pérez…. Yo quería estar bien con el vecino mío, que era un alcalde poderoso”, sostuvo Delgado Montalvo a preguntas del Ministerio Público.
Relata cómo fue sobornado
El interrogatorio del exalcalde de Cataño también se enfocó en el acceso que obtuvo Santamaría mediante el testigo para conseguir contratos con el ayuntamiento, cómo este recibió los sobornos y comenzó a colaborar con las autoridades federales.
Durante su testimonio, Delgado Montalvo narró las razones por la que decidió cooperar autoridades federales a partir del verano de 2020, cuando escuchó rumores de que estaba siendo investigado por el Negociado Federal de Investigaciones (FBI).
Según el exejecutivo municipal, en el 2019, cuando ya recibía sobornos a cambio de otorgar contratos, este se había reunido con Santamaría para asegurarse de que ninguno hablaría sobre el intercambio que ocurría entre ambos. No obstante, cuando se enteró de que las autoridades federales allanaron las oficinas del Fondo del Seguro del Estado, donde trabajaba su esposa, este se reunió con un abogado y llamó al FBI para comenzar a colaborar.
“Se coordinó una reunión con fiscalía y el FBI en la oficina de mi abogado… Y les expliqué los actos de corrupción que estaba haciendo y que hice por todo ese tiempo”, contestó Delgado Montalvo durante el interrogatorio realizado por la fiscal federal Myriam Fernández.
Como parte del acuerdo entre ambas partes, este comenzó a grabar las transacciones y conversaciones con Santamaría, dueño de la empresa de recogido de basura Waste Collection, Mario Villegas y Raymond Rodríguez, de la empresa JR Asphalt y el contratista José Bou Santiago.
No obstante, este afirmó que no grabó conversaciones con Pérez Otero.
Asimismo, Delgado Montalvo también explicó que terminó enredado en la otorgación de contratos debido a los favores políticos que se veía forzado a aprobar al llegar a la alcaldía. Por ejemplo, este detalló que en ocasiones tenía que aprobar contratos aunque no quería y que su vicealcaldesa solía firmar estos para no comprometerlo a él en futuras demandas o acciones legales.
“Cuando tienes el poder de ser el alcalde, hay gente que te ayuda en las campañas y para devolverles el favor, hay que otorgarle contratos…. Si no se hace, podemos tener problemas”, dijo.
Como parte del acuerdo al que llegó con las autoridades, confirmó este, se le confiscaron cuatros relojes Rolex que recibió como soborno, otro reloj “Vacheron Constatin” y $105,820 en efectivo que recibió mediante los sobornos entregados desde que comenzó a colaborar con las autoridades federales.
Otro momento que resaltó durante el interrogatorio fue cuando Delgado Montalvo explicó cómo comenzó a recibir dinero a cambio de sobornos. De acuerdo a este, una vez entró al cargo de alcalde en el 2016 comenzó a recibir sobornos de Santamaría y otros funcionarios de confianza.
Delgado Montalvo entabló que de la única manera que entraba en acuerdo era si ejercían el “código de lealtad” y no hablaban al respecto de ese tema.
“En estas posiciones, como alcalde, si no tienes confianza con la persona, no vas a recibir dinero porque… aquí entra un código de lealtad que ninguno fuera a delatar a la otra”, dijo antes de reconocer que rompió ese código.
El interrogatorio de Delgado Montalvo fue interrumpido para recesar los trabajos del juicio para un almuerzo, pero reanudará esta tarde.
El segundo día del juicio vio, además, la continuación del testimonio de Carlos De Jesús Pagán, quien tomó ayer en la tarde el asiento del testigo para ser interrogado por la fiscal federal Myriam Fernández antes de recesar hasta esta mañana.
De Jesús Pagán identificó unas facturas que fueron utilizadas como evidencia y que muestran los pagos que emitió el Municipio de Guaynabo a la compañía Island Builders, que le pertenece a Santamaría y que en ese momento presidía De Jesús Pagán.
En ese turno de preguntas, De Jesús Pagán reconoció que no tenía acceso a la cuenta de banco de la empresa, pero recibió copia de los depósitos que emitió el ayuntamiento.
El testigo también reconoció un documento que se utilizó como evidencia y que muestra una propuesta que elaboró para realizar mejoras en las carreteras del barrio Río Ward a un precio total de $871,751.63.
De igual forma, este también testificó que nunca se reunió con el alcalde para hablar sobre este asunto.
El juicio recesó esta tarde y los trabajaron se reanudarán el lunes a las 9:00 de la mañana.
Lo que ha salido a relucir hasta ahora
Ayer también tomó juramento y fue interrogado el vicealcalde de Guaynabo, Eduardo Faría Rodríguez, quien corroboró varios contratos que el municipio le otorgó a Island Builders para realizar obras en las carreteras del ayuntamiento.
Los contratos fueron firmados en el 2020 por la entonces vicealcaldesa del municipio Mariela Vallines Fernández y por De Jesús Pagán, pero luego sufrieron enmiendas bajo la próxima vicealcaldesa, Luisa M. Colom García.
La primera versión del contrato tenía un monto de $871,751.60, pero las enmiendas luego subieron esa suma a $2,396,751.60.
El primer día del juicio también se enfocó en las argumentaciones iniciales de ambas partes. Ante el jurado, compuesto por nueve mujeres y tres hombres, se presentó el fiscal federal Nicholas Warren Cannon, cuyo turno comenzó al catalogar este caso como uno de “codicia y poder”.
El abogado también adelantó que durante el juicio se podrá apreciar cómo Pérez Otero sostuvo múltiples reuniones con Santamaría dentro de carros y en restaurantes, donde el exalcalde recibió tres pagos de $5 mil y luego de los escondió en la media para seguir su camino a la Alcaldía de Guaynabo.
Según este, los pagos fueron entregados por Santamaría para que Pérez Otero le concediera sobre $2 millones en contratos a Santamaría.
En cambio, durante el turno de la defensa que realizó el abogado Osvaldo Carlo Linares, ese relato se refutó para aclarar que los pagos que fueron retratados supuestamente eran relacionados a costos de la campaña política de Pérez Otero y que Santamaría se había comprometido con hacer como manera de aliviar la relación que ambos tenían y que había sido fracturada luego de la carrera por la alcaldía de Guaynabo en el 2018.
Durante estos turnos iniciales se adelantó, además, que sentarían a testificar a Santamaría y Delgado Montalvo.
Contra Pérez Otero pesan tres cargos criminales por conspiración, sobornos y comisiones ilegales; soborno con programas federales; y extorsión por un oficial público, por lo que se podría enfrentar a una pena máxima de 35 años si es encontrado culpable de estos tres cargos.
