La Asamblea Nacional del Partido Independentista Puertorriqueño (PIP) celebrada este domingo en el Centro de Convenciones Pedro Rosselló González demostró ser el evento con mayor participación en los últimos tiempos.
“Nosotros no vamos a escondernos en un lobby o en un callejón, en esta multitud, de todos los rincones de la isla confirma que la tierra prometida ya se ve llegar”, comenzó diciendo el líder independentista, Rubén Berríos.
En su discurso, el exsenador resaltó las condiciones que vive el archipiélago. Estableció que el pueblo necesita “un nuevo curandero” por los “males políticos”.
“Este pueblo entero, la inmensa mayoría de este pueblo, no solamente los que hemos votado por el independentismo, sino los que han votado por PNP y PPD, están en búsqueda de un médico nuevo. Están esperándonos. Ahora depende de nosotros llevarle la medicina”, manifestó Berríos.
Haciendo referencia a la alianza PIP-MVC, aludió a que hay una esperanza de ver una nueva realidad en Puerto Rico.
Argumentó que “la tierra prometida está cerca”, dado el aumento del apoyo que se ha visto en los últimos años. Asimismo, que verán el éxito de la mano del candidato a la gobernación por el PIP, Juan Dalmau, y la alianza de ambos partidos. Según indicó, esta iniciativa será ese “vehículo” para optar por lo que describió como un “médico nuevo”.
Además, invitó a los electores no independentistas a que apoyen al partido, “sin tener que decidir en el momento” cambiar sus ideologías. Berríos le dijo a los votantes que no tengan miedo de apoyar a la alianza PIP-MVC, independientemente de las subscripciones políticas en cuanto al status colonial ya que cada elector será respetado y establecerá sus preferencias en una asamblea de status.
“Vamos a dejar que el pueblo decida. En una asamblea de status. Y, ¿qué haremos los independistas? Votaremos por el independentismo”, afirmó.
Añadió que el pueblo “sabe la honestidad del independentismo” y declaró que el partido ha dado cátedra sobre la “honestidad y limpieza”.
El expresidente del PIP, estableció que sabe que “triunfarán” reconociendo la nobleza de los estadistas y de los populares que buscan una mejoría del país.
“Tengo un defecto y es que soy egoísta. Yo no quiero ver la tierra prometida, yo quiero junto a Juan Dalmau, quien encabeza nuestra papeleta, entrar a la tierra prometida”, finalizó.