Fallas en la ejecución de LUMA Energy contribuyeron a los apagones registrados en Puerto Rico que dejaron sin servicio eléctrico a cientos de miles de clientes el pasado mes de junio.
Así se desprende de la investigación realizada por FTI Consulting, Inc. (FTI), una compañía externa contratada en la Autoridad para las Alianzas Público-Privadas (AAPP).
El sábado 1º de junio pasado, comenzó una serie de interrupciones en el servicio eléctrico en Puerto Rico. Estos eventos incluyeron tres apagones separados relacionados con el sistema de 38 kV de Santa Isabel y fueron seguidos por dos cortes de energía grandes adicionales que duraron desde el miércoles 12 de junio hasta el día siguiente, jueves 13 de junio de 2024.
LUMA, a cargo de los sistemas de transmisión y distribución de energía, incurrió en “falta de diligencia desde el punto de vista técnico”, sostuvo el director ejecutivo de la Autoridad de Asesoría Financiera y Agencia Fiscal de Puerto Rico (AAFAF), Omar Marrero, durante una mesa redonda con periodistas en la que ofreció los principales hallazgos de la investigación. No obstante, el funcionario evitó utilizar la palabra negligencia para calificar las acciones de LUMA.
Junto a Marrero estuvieron presentes el secretario auxiliar de la Gobernación para Asuntos Energéticos, Francisco Berríos; el director ejecutivo de la AAPP, Fermín Fontanés y el director ejecutivo de la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE), Josué Colón.
El informe de FTI Consulting, al que Metro tuvo acceso, califica de errónea la presunción de LUMA de que el sistema de transmisión y distribución se encontraba en condiciones normales al momento de los eventos de interrupciones en el servicio eléctrico.
“LUMA ha declarado que creía que el sistema de transmisión y distribución, al menos en el primer conjunto de cortes de suministro en Santa Isabel, se encontraba en condiciones “NORMALES” en el momento de estos eventos. FTI cree que se trata de una evaluación errónea del sistema y que esta creencia puede haber provocado una falta de conciencia situacional y de planificación de contingencias. En los eventos de cortes de suministro importantes del 12 de junio, también se puso de manifiesto la falta de análisis de la carga en riesgo, ya que los eventos que ocurrieron normalmente no desencadenan un corte de suministro de tal magnitud”, lee el informe de 22 páginas.
La investigación señala que en la operación LUMA “parece haber una falta de estricto cumplimiento de los requisitos de las normas de confiabilidad del North American Energy Reliability Corporation (NERC)”.
También se señala “una mala gestión al priorizar y atender o de sentido de urgencia de los problemas de vegetación”.
En ese sentido el informe establece que “los problemas de vegetación se clasificaron incorrectamente o no se priorizaron de acuerdo con los posibles impactos. Se señaló que en al menos dos casos, las inspecciones de vegetación detectaron problemas, pero no priorizaron estas ubicaciones como urgentes. “El sistema de 115 kV recién ahora está iniciando un programa de limpieza de derechos de paso, ya que la prioridad ha sido el sistema de 230 kV”.
Asímismo, el informe de FTI sostiene que el sistema de dispositivos de protección en los eventos no proporcionó la protección primaria y de resguardo requerida y se observó que las comunicaciones externas parecieron no seguir un proceso estandarizado y ordenado.
El informe de FTI establece que al momento de los apagones del 12 y 13 de junio, había una cantidad considerable de restricciones en el sistema de transmisión y distribución. “Estas incluían: el transformador de 230/115 kV de Bayamón estaba fuera de servicio desde 2023, el transformador n.° 2 de 230/115 kV de Sabana Llana estaba fuera de servicio (durante muchos años), un disyuntor de 115 kV en la línea de autobuses de San Juan estaba fuera de servicio y restricciones adicionales de 38 kV en San Juan, incluidas varias líneas que estaban en una configuración radial”.
“Este nivel y cantidad de restricciones, combinado con fallas causadas por la vegetación y el hardware, hicieron que muchos generadores se desconectaran y provocaran cortes en áreas extensas”.
Genera PR
La investigación de FTI incluye señalamientos a la empresa Genera PR, a cargo de las plantas generatrices.
Entre estos, se indica que “parece haber una falta de verificación de la operatividad de los sistemas de baterías y los suministros ininterrumpidos de energía (”Uninterruptible Power Supplies” o “UPS”), que son cruciales en situaciones de emergencia”.
Según FTI, la protección contra sobrevelocidad no funcionó como se requería en Cambalache. “Las calibraciones de los dispositivos de protección realizadas bajo el servicio compartido entre LUMA y Genera aún necesitan ser verificadas”.
Como parte de su gestión investigativa, FTI trazó una serie de recomendaciones para LUMA y Genera que el Gobierno de Puerto Rico acogerá como acciones a exigir a ambos operadores.
Entre las recomendaciones a LUMA, se encuentran:
- Establecer una planificación formal de contingencias para carga en riesgo y cumplimiento con NERC
- Mejorar la protección de relés y la protección de respaldo.
- Revisar prioridades en el manejo de la vegetación.
Por otro lado, entre las recomendaciones a Genera PR, FTI propone:
- Verificar sistemas de baterías y suministros ininterrumpidos de energía (UPS).
- Protección contra sobrevelocidad y calibración de relés de protección.
Marrero sostuvo que la AAPP referirá el informe al Negociado de Energía de Puerto Rico (NEPR), que es el ente a cargo de la supervisión de los aspectos técnicos de la operación de LUMA y Genera.
Manifestó que una vez el NEPR culmine su investigación se podrán determinar las acciones correspondientes tanto por la AAPP como por el propio Negociado, incluyendo sanciones por incumplimiento, si así se determinara. El NEPR deberá pasar juicio sobre los hallazgos para proveer conclusiones y acciones finales, afirmó.
Reacciona LUMA
El consorcio energético aseguro que “ya ha tomado una serie de medidas para ayudar a abordar estos problemas subyacentes de estabilidad de la red. Por ejemplo, hemos reemplazado un transformador grande en el centro de transmisión de Bayamón, incluso mientras continuamos modernizando los equipos de transmisión y subestaciones obsoletos en toda la isla para mejorar la confiabilidad a largo plazo. En el sur, reconstruimos y energizamos la línea 200 y estamos en proceso de instalar un transformador en la subestación Santa Isabel. Además, ya hemos lanzado la Iniciativa de Seguridad y Confiabilidad de la Vegetación que despejará estratégicamente la vegetación peligrosa de más de 16,000 millas de líneas eléctricas que ayudará a reducir las interrupciones de servicio hasta en un 45% en toda la isla una vez completado”.
Responde Genera PR
Por su parte, Genera PR dijo que evalúa el informe. “El mismo está siendo evaluado por nuestro equipo de operaciones, de modo que podamos identificar qué acciones nos corresponden, en cuyo caso, estaremos atendiendo las mismas de manera seria, responsable y con el mayor sentido de urgencia”.
