La reina Isabel II asistió el domingo al bautizo de dos de sus bisnietos.
La monarca de 95 años de edad, que ha cancelado varios eventos en días recientes por consejo de sus médicos, asistió a los bautizos de Augusto, hijo de la princesa Eugenia y su esposo Jack Brooksbank, y de Lucas Philip, hijo de Zara Tindall y su esposo Mike Tindall.
Al evento privado en el Royal Lodge en Windsor Great Park, al oeste de Londres, asistieron miembros de la familia real y amigos cercanos.
Augusto nació en febrero y Lucas en marzo. Las madres de ambos bebés son nietas de la reina.
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La reina tiene 12 bisnietos, el más joven de los cuales es Sienna Elizabeth, de 2 años, hija de la princesa Beatrice y su esposo Edoardo Mapelli Mozzi.
Han surgido inquietudes por la salud de la monarca desde el mes pasado, cuando estuvo una noche en un hospital de Londres para pruebas médicas. A fines de octubre, el Palacio anunció que los médicos aconsejaron a la reina descansar por dos semanas y aceptar sólo deberes livianos.
La reina iba a asistir a la ceremonia anual del Día de la Recordación el 14 de noviembre pero lo canceló a último minuto al lastimarse la espalda.
El miércoles, la reina reanudó sus funciones públicas, en una audiencia en persona en el Castillo de Windsor, con los jefes salientes de las fuerzas armadas británicas.
Isabel II es la reina de Inglaterra más longeva y de mayor tiempo en el trono. El próximo año celebrará su aniversario de platino, al cumplir 70 años en el trono.
