A pesar de la cercanía de las primarias en los partidos Nuevo Progresista (PNP) y Popular Democrático (PPD), pautadas para este domingo, los informes de campaña disponibles de los aspirantes a un escaño legislativo en ambos bandos reflejan una inversión mínima en la compra de anuncios en los medios y la contratación de agencias de publicidad.
Lo cierto es, sin embargo, que en la página de la Oficina del Contralor Electoral (OCE) apenas se han publicado dos informes correspondientes al trimestre de abril a junio, de un total 43 precandidatos a escaños por acumulación en la Cámara de Representantes o el Senado.
El contralor electoral, Walter Vélez, explicó que la inmensa mayoría de esos informes fueron entregados en cumplimiento con la fecha límite del 20 de julio y que la OCE espera publicarlos a partir de hoy, tras completar el proceso de revisión. Junto con esos documentos también deberán publicarse buena parte de los informes correspondientes al trimestre de enero a marzo, cuyas radicaciones se vieron retrasadas por los cierres gubernamentales durante la pandemia del COVID-19.
Aun así, Vélez indicó que se ha observado una reducción “atípica” en los gastos de medios incurridos por los aspirantes legislativos, que se observa igualmente en los candidatos a otros cargos.
Los dos precandidatos a escaños por acumulación que más han invertido en publicidad desde 2019 para acá son el senador William Villafañe y la profesora Keren Riquelme, quienes buscaron llenar, en la elección especial de noviembre pasado, dos escaños dejados vacantes por legisladores novoprogresistas. Villafañe, quien logró uno de los escaños, gastó $51,280 en publicidad en aquel entonces, mientras que Riquelme se quedó corta después de invertir $16,883.97. Riquelme se convertirá en senadora este domingo al ser la única aspirante al escaño que dejó Abel Nazario tras ser convicto por corrupción a nivel federal.
De los otros 41 precandidatos, 36 no habían invertido, desde comienzos de 2019, un solo centavo en publicidad de acuerdo con los informes publicados por la OCE. Entre los cinco que sí invirtieron, el presidente senatorial, Thomas Rivera Schatz, era el que más había gastado en pautas mediáticas, con $3,895.
Si bien en los informes correspondientes a la segunda mitad del año, ante la celebración de las primarias y las elecciones generales, reflejarán un aumento en el gasto en publicidad, Vélez anticipó que las cifras no serán comparables a las de ciclos electorales anteriores debido a la drástica merma en recaudos de campaña durante los últimos dos cuatrienios. Según el abogado, los recaudos de campaña para esta fecha, al compararse con los registros de hace cuatro años, reflejan una merma de 78 %.
El contralor electoral detalló que, de cara a los eventos electorales de 2012, los donativos políticos ascendieron a $78 millones, cifra que se redujo a $38 millones, menos de la mitad, en 2016. Para cuando finalice el actual proceso electoral en noviembre, el estimado de Vélez es que esa cifra global rondará los $15 millones.
“Las redes sociales básicamente se quedaron con lo que es el mensaje a la ciudadanía. No se ve mucho anuncio de televisión o radio como antes”, resumió el funcionario.
