El Centro de Conservación de Manatíes del Caribe (CCMC), ubicado en las facilidades de la Universidad Interamericana de Puerto Rico (INTER) en Bayamón, informó este domingo sobre el hallazgo de un manatí joven muerto en una playa del municipio de Arroyo.
Según la organización, el cadáver del manatí fue encontrado en un avanzado estado de descomposición, pero se pudo constatar que la cría tenía el área abdominal inflada, mientras que otras partes del cuerpo mostraban una condición corporal deficiente y un peso inferior al esperado para su tamaño.
“A pesar del estado, el cadáver nos brindó información valiosa sobre su salud. Por lo que este animal debió tener una enfermedad crónica, asociado a desnutrición e inmunosupresión, lo cual favoreció al desarrollo de una parasitosis (infección grave por endoparásitos) que exacerbó la condición y contribuyó a la muerte del individuo”, explicó la entidad.
Asimismo, el organismo científico detalló que la pérdida del hábitat, la desaparición de las praderas de hierbas marinas, la contaminación, el impacto humano y el cambio climático son algunos de los factores que amenazan diariamente la vida de estos animales.
De acuerdo con el Departamento de Recursos Naturales y Ambientales (DRNA), el manatí es un mamífero marino herbívoro, que usualmente vive en aguas poco profundas y se alimenta de yerbas marinas.
La población de manatíes en el pasado disminuyó, principalmente, por el consumo de su carne.
“En 1893, se aprobó aprueba legislación en Estados Unidos para proteger los manatíes de captura. Actualmente, las poblaciones existentes están siendo afectadas por actividades humanas relacionadas con el intenso desarrollo de las zonas costaneras”, explicó la agencia en su página web.
En la Isla, los manatíes habitan cerca de la costa y en áreas estuarinas. Estudios realizados por el DRNA apuntan que en la Bahía de Jobos se ha establecido una población significativa de manatíes.
Para reportar una especie en peligro o bajo amenaza, llame al Cuerpo de Vigilantes al (787) 724-5700.