Los peores temores de los expertos en el tema electoral se materializaron ayer cuando cientos de miles de votantes afiliados al Partido Nuevo Progresista (PNP) y el Partido Popular Democrático (PPD) no pudieron ejercer su derecho en el proceso primarista ante la incapacidad de la Comisión Estatal de Elecciones (CEE) para tener listas las papeletas necesarias para la mayoría de los 110 precintos en el país.
En una situación sin precedentes en la isla, el evento electoral fue parcialmente suspendido cuando las comisiones de primarias de ambos partidos acordaron posponer hasta el próximo domingo las votaciones en aquellos precintos cuyos colegios no hubieran abierto a las 1:45 p.m. de ayer, al tiempo que se prohibió la divulgación de los resultados de las unidades que completaron la votación.
En el caso del PPD, apenas 36 precintos pudieron llevar a cabo el evento primarista ayer, según lo disponía la resolución conjunta 37 que, debido a la pandemia del Covid-19, retrasó el proceso que originalmente estaba programado para el 7 de junio. Un documento suministrado por la colectividad detalla que los maletines destinados a otros tres precintos de Ponce se encontraban “en camino”. La oficial de prensa de Lind Orlando Merle Feliciano, comisionado electoral de la Pava, precisó que los maletines correspondientes llegaron a un cuartel de la Policía en el municipio sureño, donde permanecerán custodiados hasta el domingo.
Partiendo de esa información, en 74 de los 110 precintos, o un 67%, el evento primarista, donde los populares por primera vez escogían su candidato a la gobernación, no se pudo celebrar. Solo en 13 de los precintos las primarias se llevaron a cabo en el horario estipulado, de 8:00 a.m. a 4:00 p.m., mientras en otros, como los precintos 41 y 42 de Mayagüez, empezaron tan tarde como a las 2:30 p.m.
Metro intentó contactar a la comisionada electoral del PNP, María Dolores “Lolin” Santiago, para obtener los datos correspondientes a la primaria de la Palma, pero al cierre de esta edición no había obtenido respuesta.
Lo cierto es que las primeras señales de lo que se concretó el domingo se habían presentado el 1 de agosto, cuando el PNP comenzó atropelladamente una etapa de voto adelantado en la cual, igualmente, faltaron papeletas y otros materiales en los colegios electorales. A lo largo de la pasada semana, el componente electoral de ambos partidos alertó que aún la CEE no les había entregado cientos de miles de papeletas necesarias para poder completar el ensamblaje de los maletines que se envían a cada unidad.
El líder del PNP, Thomas Rivera Schatz, y su homólogo en el PPD, Aníbal José Torres, encabezaron un reclamo casi unánime de diversos sectores políticos para que el presidente de la CEE, Juan Ernesto Dávila, dejara el cargo ante la debacle experimentada en un proceso en el que se esperaba, incluso con la amenaza salubrista, la participación de varios cientos de miles de votantes, cifra que se queda corta de los cerca de 1.5 millones de electores que acudieron en las urnas en las elecciones generales de 2016.
La gobernadora y precandidata novoprogresista, Wanda Vázquez, se hizo eco de las palabras de Rivera Schatz, al responder “yo sí se lo pido” a la pregunta de si solicitaba la renuncia de Dávila, un juez nombrado al puesto por el exmandatario Ricardo Rosselló que corría su primer evento electoral de gran envergadura.
“El único responsable de todo lo acontecido en el día de hoy es el presidente de la Comisión Estatal de Elecciones”, sentenció Torres, aunque posteriormente también criticó a la gobernadora por convertir en ley, hace apenas unas semanas, un nuevo Código Electoral, precisamente de la autoría de Rivera Schatz.
El PPD, indicó su presidente, llevará a cabo hoy una reunión de su Junta de Gobierno.
Ayer, Dávila optó por no atender a la prensa que esperaba en el coliseo Roberto Clemente, donde la CEE, bajo condiciones ordinarias, hubiera comenzado a recibir los resultados de las votaciones a partir de las 4:00 p.m. En entrevistas ofrecidas a varios medios no precisó cuál sería su futuro al mando del organismo electoral y, aunque asumió responsabilidad parcial por el caos primarista, refutó la información sobre la falta de papeletas impresas, al asegurar que desde el mediodía del sábado estaban listas.
El rival primarista de Vázquez, Pedro Pierluisi, y su aliada, la comisionada residente Jenniffer González, criticaron a la CEE por posponer por una semana la continuación del evento, una determinación que el precandidato catalogó de “ilegal”.
“No hay disposición legal que sirva de base para tomar esta decisión y he hablado de que en todo caso al revés, la Constitución protege el derecho al voto…Había que hacer lo indecible”, manifestó Pierluisi, quien, aunque en la conferencia de prensa rechazó impugnar el acuerdo alcanzado entre las comisiones de primarias de ambos partidos, entrada la noche presentó un recurso solicitando que se dejara sin efecto la decisión de prohibir la divulgación de los resultados preliminares.
Según varias filtraciones obtenidas por la prensa, el ex comisionado residente mantenía ventaja considerable sobre la primera ejecutiva.
El aspirante novoprogresista a la alcaldía de San Juan, Miguel Romero, se proclamó ganador de su primaria sobre Manuel “Palomo” Colón y exigió a la CEE que lo certificara como candidato al plantear que, en los cinco precintos capitalinos, se había podido completar el proceso.
El director de campaña de Romero, Ángel Cintrón, mostró unos resultados que apuntaban a una ventaja de 76% a 24% del senador sobre Colón.
En el bando popular, el precandidato a la gobernación Carlos “Charlie” Delgado Altieri exigió inicialmente que los sufragios de ayer fueran anulados y se celebrara una votación nueva.
“Estamos viviendo el desastre de una crónica anunciada… Aquí hay grandes irregularidades”, dijo el alcalde isabelino, quien, como Pierluisi, también aparecía en ventaja según las supuestas actas de algunos precintos que fueron divulgadas de manera extraoficial.
Sin embargo, en horas de la noche, celebró una conferencia de prensa en la que amenazó con ir a la corte si no se cuentan con los votos emitidos en los municipios en que se logró realizar la primaria.
Una de los dos rivales de Delgado Altieri, el senador Eduardo Bhatia, estuvo entre los que ayer exigieron que se paralizara el evento en aquellas unidades donde los camiones de la CEE no hubieran llegado, al tiempo que se completaban las votaciones en los lugares donde sí se habían entregado los maletines.
Mientras, al igual que Delgado Altieri, la alcaldesa capitalina Carmen Yulín Cruz, dejó la puerta abierta a presentar una demanda por lo ocurrido ayer, desastre que achacó al intento de la gobernadora de robarle la primaria a Pierluisi.
“Estoy segura de que esto es deliberado. ¿Sabes por qué? Por el silencio”, dijo la aspirante a la gobernación.